Jürgen Klopp, entrenador del Borussia Dortmund, dejará su cargo al final de la temporada. En la imagen camina ´por la cabcga de entrenamiento del equipo alemán este 15 de abril. Foto: AFP
Jürgen Klopp provocó hoy una de las grandes sorpresas del año en el fútbol alemán al anunciar que dejará el Borussia Dortmund después de siete años en el club por no sentirse ya “el técnico perfecto” tras una mala temporada.
El entrenador de 47 años, uno de los más exitosos de los últimos años en Alemania, pidió rescindir su contrato al final de la temporada y el Dortmund lo aceptó. Según especulaciones en los medios, su sustituto podría ser Thomas Tuchel, ex entrenador del Mainz.
“Decidimos que el camino que recorrimos durante siete años con un éxito increíble se termina a fin de temporada”, dijo el presidente del club, Hans-Joachim Watzke, visiblemente emocionado, en una rueda de prensa.”Esto nos conmovió mucho tanto a mí como a Jürgen“.
Klopp, que en 2013 había prolongado su contrato hasta 2018, calificó de “absolutamente correcta” la decisión y aseguró que no hubo ningún factor ajeno al fútbol que la motivara. “Uno es un profesional y tiene que poder tomar una decisión así“, señaló. “Durante estos años supe que si en algún momento no era ya el técnico perfecto para este club extraordinario lo diría. En las últimas semanas y días me di cuenta de que ya no podía responder a esto con un claro sí”, añadió.
La sorpresiva salida fue descrita como “un terremoto” en la prensa alemana y provocó incluso una fuerte caída de las acciones del Dortmund en Bolsa. Klopp llegó al Dortmund en 2008 proveniente del Mainz. Desde entonces renovó el equipo en base a jóvenes talentos como Mats Hummels, Kevin Grosskreutz, Mario Götze o Ilkay Gündogan -algunos de ellos luego campeones del mundo con Alemania- y llegó a convertirlo en el más poderoso del fútbol alemán y uno de los más fuertes de Europa.
Bajo su mando, el Dortmund fue campeón de Liga en 2011 y 2012 y subcampeón en 2013 y 2014. Además ganó la Copa Alemana en 2012 y las Supercopas de 2013 y 2014 y cayó en la final de la Liga de Campeones europea en 2013 ante el Bayern Múnich.