¿Zubeldía está fracasando en Liga?

Los hinchas de Liga se están preguntando si Luis Zubeldía está fracasando en la U. A estas alturas es prácticamente irreversible que la primera etapa está perdida y que, 10 fechas después, no existe un plantel equilibrado, confiable y con movimientos mecanizados que aspire a algo importante.

En la tabla está muy cerca el descenso, lo cual ya está generando nervios y temores parecidos al del 2000, cuando un equipo muchísimo mejor que el de ahora se fue de cabeza a la Serie B. ¿Cuáles son las razones de esto? Enumeremos:

1.  No hay dinero. Es  la principal. Ya no hay recursos para traer a los Barcos, Salgueiros y demás jugadores de buen pie. Los extranjeros que han llegado desde el 2011 han sido penosamente intrascendentes y los de este año caen en esta categoría, al menos hasta que demuestren lo contrario. Tampoco hubo fondos para conseguir a jugadores ecuatorianos de primer nivel. Ha tocado afrontar el reto del 2014 con los juveniles, con tres y hasta cuatro por partido, algo que en Liga no era habitual. Son muchos inexpertos al mismo tiempo, y lo lógico es que se cometan novatadas, como se ha registrado en este trimestre de terror.

2.  No hay delanteros. Sin gol, pues simplemente no sirve de nada cualquier esfuerzo para encontrar un equipo, una idea táctica, un espíritu. Otra vez, Liga carece de un definidor pues Félix Borja hace justicia a su fama de artillero de pólvora mojada y escasa efectividad. Es un misterio que esté en Liga. No hay esperanzas de que ‘El Canguro’ se destape a pesar de que la idea era justamente que meta goles a camionadas para pedir un puesto en el Mundial. Pues a este paso, el único puesto que Borja tiene seguro es el de la recisión de contrato.

3.  No hay defensa. La parte de atrás está descompensada, desigual, con un capitán que ya está cerca del retiro y con novatos que la pifian muy seguido. Toca pulir más, aguantar, seguir con la prueba y error, esperar que esto cambie con el tiempo, con la repetición. Hasta mientras, se seguirán perdiendo partidos.

4.  No hay un líder dentro del campo de juego. ¿Quién es el referente de Liga? ¿Domínguez? Pues no, es demasiado silencioso a pesar de que es el único mundialista del plantel. ¿Araujo? Nunca lo fue o al menos su liderazgo no pasa de mitad de cancha. ¿Bolaños? Ha levantado pero no como para creer que ha vuelto el crack del 2008  y no es un referente. ¿Balbi? Tampoco. La estrella es el propio entrenador, que se ha engolosinado con sus peleas con los árbitros, como en su época de canario, en lugar de engranar en el estilo de la U, menos dado al exhibicionismo. Este es el “proyecto de Zubeldía”, no el de “Liga de Quito”.

5.  No hay hinchas. Los aficionados de Liga están dando la razón a sus detractores que los acusaban de noveleros. Si los hinchas de Liga fueran más seguido habría más recursos para gestionar mejores figuras. Pero no, han preferido quedarse en casa. Allá ellos. Su equipo juega ante un puñado de fieles y una hilera fantasmal de garderíos. ¿Y los hinchas de las cuatro Copas? Rumiando frente al televisor por cable.

¿Hay posibilidades de que esto cambie? Claro que sí, pero no para este año. Quizás haya un golpe de timón para la segunda etapa y pueda verse algo de lo que pretende Zubeldía, pero en general la aspiración de entrar a un torneo internacional es demasiado optimista. Veamos que dictamina el tiempo, el supremo juez de todos nosotros.

Suplementos digitales