El ex ídolo del fútbol Sócrates, quien falleció hoy a los 57 años de edad, se destacó por su inteligencia y liderazgo tanto dentro como fuera del campo de juego, lo cual le valió el respeto de sus compañeros y de la exigente hinchada brasileña.
Sócrates, que reconoció recientemente tener una lesión cirrótica en el hígado provocada por su dependencia al alcohol, falleció debido a una infección intestinal, informó el Hospital Albert Einstein de Sao Paulo, donde estaba internado.
El hermano mayor del también ex futbolista Raí, estaba casado y tenía seis hijos.
El ‘doctor’ es uno de los pocos jugadores de la historia del fútbol brasileño en contar con una formación universitaria, tras haberse recibido de médico en la reconocida Universidad de Sao Paulo (USP) .
Dueño de un juego ágil y efectivo, Sócrates Brasileiro Sampaio de Sousa Vieira de Oliveira registró su sello personal con pases de tacón que marcaron su carrera desde que debutó en 1974 en el Botafogo Fútbol Club de Ribeirao Preto, en el interior del estado de Sao Paulo.
Poco después, el ex mediocampista pasó al tradicional club Corinthians, con cuya camiseta marcó 172 goles durante su campaña entre 1978 y 1984 y levantó la copa de tres campeonatos paulistas (1979, 1982 y 1983) , convirtiéndose en uno de los máximos ídolos de la hinchada alvinegra.
En el ‘Timao’, Sócrates fue uno de los fundadores de la ‘Democracia Corinthiana’, un movimiento que surgió en la década de 1980 en la que todas las decisiones del club, como las contrataciones, entrenamientos y concentraciones, eran tomadas a través de votaciones de todos sus integrantes.
La iniciativa, que surgió en plena dictadura militar brasileña (1964-1985) , incluía inscripciones en las camisetas de tenor político como: “ yo quiero votar para presidente ” .
En 1985, con 30 años, Sócrates fue vendido para el club italiano la Fiorentina, donde jugó tan sólo una temporada.
Un año más tarde, el ‘doctor’ regresó a Brasil para jugar con el Flamengo, club con el cual conquistó el campeonato Carioca.
En los siguientes años también defendió la casaca del Santos y regresó al Botafogo de Ribeirão Preto, donde colgó los botines en 1989 a sus 35 años.
El mítico mediocampista jugó junto a figuras como Zico y Falcao, e incluso portó la banda de capitán de la selección brasileña en las Copas Mundiales de España-1982 y México-1986.
Jugador inteligente y dotado de una increíble técnica en la cancha, fuera de ella se caracterizó por tener problemas con el alcohol, los que reconoció tras haber sido dado de alta de su primera internación en agosto tras padecer una grave hemorragia digestiva.
“Tengo un punto cirrótico. Es una lesión que no es tan grave, pero está localizada en una región sensible del hígado”, dijo Sócrates en entrevista al canal televisivo Globo, y precisó que la lesión fue causada por el alcohol.
“Quien bebe cotidianamente es alcohólico”, afirmó al admitir su dependencia.
Los problemas con la bebida en el fútbol brasileño ya cobraron la vida de otro gran ídolo auriverde: Garrincha, que falleció en 1983 a causa de una cirrosis hepática.