Los diez jugadores, el entrenador uruguayo Hugo Eugui y un ayudante que fueron expulsados el viernes tras una riña en un partido de fútbol de la segunda división en Guadalajara “perdieron el equilibrio mental”, afirmó hoy el presidente de la federación mexicana, Decio De María, al condenar los hechos.
Estudiantes Tecos ganaba por 2-1 a Dorados de Culiacán en el estadio 3 de marzo cuando, a nueve minutos del final, se desató una pelea campal en la cancha.
Por causa de los golpes y las patadas que intercambiaron, uno de los jugadores resultó con fractura en la nariz.
El entrenador de los Estudiantes, el uruguayo Héctor Hugo Eugui, y seis de sus jugadores, así como el auxiliar técnico de los Dorados de Culiacán Francisco Palacios y cuatro futbolistas de esa plantilla vieron la roja.
“Es muy lamentable cualquier tipo de violencia, sobre todo en el terreno de juego”, declaró Decio de María Serrano, quien a la vez preside el torneo de ascenso, conocido como Liga MX.
Antes de la riña entre los componentes de ambos equipos, los Dorados de Culiacán jugaban con diez por la expulsión de un titular.