La pasión por Lionel Messi no conoce fronteras: el futbolista de Barcelona desató hoy la locura de unos 300 seguidores que lo esperaban en Berna, donde la selección argentina se medirá el miércoles con Suiza.
Los simpatizantes locales se apostaron desde temprano en la puerta del hotel donde está alojada la “albiceleste” concentrando para el amistoso internacional. Cuando el último domingo llegaron los primeros once jugadores del equipo había tres periodistas argentinos esperando en la puerta del hotel, donde no había hinchas.
Hoy, estaban los principales canales de televisión suizos y la prensa japonesa, que llegaron para cubrir la llegada de Messi. Además, unas 300 personas con camisetas de Argentina y el nombre de Messi desbordaron a la seguridad. Así, uno diez policías tuvieron que llegar al lugar e improvisar un vallado de contención para la entrada del crack al hotel, mientras los fanáticos querían tocar y saludar al ídolo.
Previo a que Messi baje del bus lo hicieron Gonzalo Higuaín y Eduardo Salvio, pero prácticamente nadie advirtió su llegada, tal como sucedió cuando descendió Javier Mascherano, que lo hizo segundos después de Messi.
De esta manera, ya están casi todos los jugadores convocados por el entrenador Alejandro Sabella para el partido del miércoles. Solo resta la llegada del mediocampisat del Liverpool Maximiliano Rodríguez, que arribará esta noche procedente de Inglaterra.