Maximiliano Bevacqua espera que su mala racha ante el arco se termine. El delantero del
Deportivo Quito no ha podido marcar en más de seis meses.
El ‘Maxi’ dice que está tranquilo. Los 21 partidos sin marcar no le asustan ni le quitan el sueño, pese a que todos los días esté latente la pregunta: ¿cuándo volveré a anotar?
La misma incógnita la tiene Pablo Benavides, hincha del equipo chulla y admirador del delantero gaucho, de 31 años. El último gol que lo vio marcar fue el 17 de septiembre del 2011, en la décima fecha de la segunda etapa.
El ‘Maxi’ Bevacqua también recuerda ese tanto, que forma parte de los 20 que anotó el año pasado con Dep. Quito, cifra que lo convirtió en el goleador de su club.
Por ese reconocimiento, Bevacqua sigue luciendo la casaca azulgrana. El DT Carlos Ischia lo defiende siempre. El entrenador dice que el ‘Maxi’ tiene un momento de mala racha, tal como la tuvo Matías Alustiza, ahora goleador de Deportivo Quito (4 tantos).
Para sobrellevar este momento, Maximiliano también cuenta con el apoyo de Alustiza. “Yo lo entiendo, por eso pido a la hinchada que le tengan paciencia”.
El ‘Chavo’, como apodan al ahora goleador chulla, dice que después de que ingrese el primer gol, su colega será imparable, como lo fue en el Manta, equipo en el que marcó 22 goles en el 2010.
Eso es lo que espera hacer hoy el delantero Bevacqua en el partido ante Independiente, a las 12:00. Ahora, vive en la capital con su esposa Lucrecia Portmann y su hijo de 2 años y medio. Ellos son su soporte en la sequía de goles.
Sus amigos del plantel también lo ayudan a distraerse para que el mal momento no lo desanime. De vez en cuando se reúnen para preparar parrilladas.
Muy pocas veces va al cine; prefiere quedarse en casa para descansar. Actualmente, el club de la Plaza del Teatro afronta dos campeonatos: el torneo nacional y la Copa Libertadores.
Maximiliano tiene contrato con Deportivo Quito hasta fin de año. Le gusta la ciudad y ya le tomó cariño al equipo, por eso desea reencontrarse con el gol, para, si es deseo de la directiva, seguir prestando sus servicios a los chullas.
Lo que más le gusta de la capital es la seguridad que siente al caminar por su barrio. Él nació en Buenos Aires, Argentina, y piensa que la vida en esa ciudad se complicó.
“Acá soy feliz. La gente es amable. Quito es una ciudad en la que estoy tranquilo”.
Esas afirmaciones las hizo después de concluir una práctica en el complejo de Carcelén. Su nombre no constaba en la lista de jugadores que podían hablar, como lo dispone el comunicado del club, pero se dio unos minutos para tocar su situación futbolística.
“Ahora me van a llamar la atención, ya verás”, dijo el jugador después de la charla. Pese a eso se fue mostrando una sonrisa. En las prácticas poco o nada sonríe el ‘Maxi’; pero, para cuando se alista para tomarse fotos, colabora. “¿Ahí estoy bien?”, ¿Mejoro si giro hacia allá (derecha)?”.
La amabilidad es una de las cualidades del ariete, por eso lo conocen en el complejo del Quito, al que acude cada mañana con Luis Escalada. “Yo tengo el auto, nos alternamos para conducirlo”.
Sus cifras
Con Manta anotó 22 goles y participó en 40 compromisos, en el 2010.
Con Deportivo
Quito, en el 2011, Maximiliano Bevacqua marcó 20 goles en 44 cotejos.
Hasta el momento suma 21 partidos sin anotar.