En la Bundesliga se dio un hecho anecdótico. En el partido entre el Werder Bremen y Núremberg pasó lo que se podría considerar el mejor acto de juego limpio de lo que va en el 2014.
Los ‘lagartos’ ganaban 2-0 al equipo local y Aaron Hunt cayó en el área. El árbitro del partido dio penal por la caída ante los reclamos de los locales.
Sin embargo, el volante del Werder Bremen se acercó al árbitro y le dijo que no hubo penal. El juez del partido se retractó y siguió con el partido. Hunt fue felicitado por los jugadores del equipo rival por decir la verdad.