La honestidad y entrega en un 100% en los clubes donde trabajé me permitieron hacer amigos y mantenerme por 17 años como futbolista profesional.
Ahora tengo la oportunidad de seguir vinculado a esta actividad. Laborar con gente de experiencia como Marcelo Elizaga ayuda a dejar bases en los más jóvenes. Por ejemplo, Adrián Bone aprende del intercambio de experiencias y eso es positivo para él y para el club.
La metodología de enseñanza es mucho mejor en la actualidad, porque nos permite formar a la persona con valores y prepararlos en lo deportivo. Antes se trabajaba al deportista únicamente en lo físico y eso impedía que se pueda crecer en lo educativo y en otros campos que son importantes en la formación del ser humano.
Hoy, como ciudadano, tengo la suerte de tener una empresa de fabricación de ropa deportiva y de esta forma puedo brindar plazas de trabajo a 12 personas para que puedan sentirse útiles en la sociedad. Ellos también se superan en lo laboral y aportan en la parte económica en cada uno de sus hogares.