Fernando Guerrero reflexiona sobre el escaso número de jugadores ecuatorianos en Europa. Habla sobre su experiencia en ese continente.
Hoja de vida
Nació el 30 de septiembre de 1989 en Quito (tiene 23 años). Su club actual es el Independiente del Valle donde juega como mediocampista.
El ‘Chiqui’, hijo del ex futbolista Lupo Guerrero, migró a España de niño, junto a su padre. Luego, se unió a las juveniles del Real Madrid. Ahí, estuvo ocho años.
También actuó una temporada en el Burnley de Inglaterra (2009-2010).
Existe la percepción de que en las ligas de Europa se apela más a la táctica y al despliegue físico a diferencia de Sudamérica donde hay más técnica de los jugadores. ¿Es real esa diferencia?
Los entrenadores sí exigen a los jugadores para que se acoplen a la táctica y a la estrategia. Pero en el aspecto futbolístico no hay mucha diferencia. El fútbol es el mismo aquí y allá. Más bien existen diferencias por el dinero que se mueve en esas ligas. En Europa existe otro estilo de vida por los montos que se ganan. Es algo que no ocurre en Ecuador y países de Sudamérica.
¿Los futbolistas gastan más por sus altos sueldos?
(Sonríe). El estilo de vida es más costoso. Hay más lujos. Se gasta en la misma proporción en que se gana.
Si el sudamericano destaca por su talento, entonces ¿le cuesta adaptarse más a la táctica?
No. A Ecuador podría venir cualquier entrenador europeo e implementar su metodología y el jugador no tendría problemas para aprender. Además, nosotros tenemos la ventaja de contar con jugadores con físicos privilegiados y hábiles. Por eso, a los europeos les agradan los sudamericanos.
¿Qué es lo que más exigen los entrenadores de Europa a los jugadores sudamericanos?
Les gusta que los jugadores respondan a la táctica. Les agrada que los futbolistas sean de “ida y vuelta” y ayuden a marcar. Así, el sudamericano se va adaptando a ese estilo de fútbol.
Aún así, pocos ecuatorianos juegan en Europa. ¿Qué hace falta para que existan más?
Hay que tener persistencia. En Europa es difícil mantenerse por mucho tiempo. Por ejemplo, para jugar en Inglaterra necesitas pertenecer a tu selección y contar con un buen porcentaje de partidos disputados con el equipo nacional de tu país. Por eso, Inglaterra es una de las mejores ligas del mundo. Esa es la ventaja que tienen los europeos ante los sudamericanos.
Pero a los sudamericanos también les toma más tiempo adaptarse a Europa…
Sí. Cuando un sudamericano se adapta saca mucha ventaja del resto. Al principio es muy complicado porque él deja su país y a su familia y tiene que acostumbrarse a otro estilo de vida. Si vas a Inglaterra y Alemania tienes que aprender rápido el idioma y eso es muy complicado.
¿Lo que usted afirma puede explicar por qué México es el país con mayor número de jugadores ecuatorianos?
Sí. México es diferente a Europa. En ese país se habla el mismo idioma y el ecuatoriano se puede adaptar rápido. Además, ellos tienen muchas cosas parecidas a los ecuatorianos.
¿El jugador europeo ayuda al sudamericano?
En mi caso no tuve problemas con ellos. El europeo sí ayuda al sudamericano a que se acople al grupo.
Usted se formó en las divisiones juveniles del Real Madrid de España, pero no se quedó en el fútbol de ese país. ¿Por qué?
Permanecí ocho años en Europa. Estuve en las inferiores y el equipo filial del Madrid y me entrené con el equipo de Primera. Y cuando salí fui a préstamo a otro plantel. Esto representa un problema porque cuando vas a préstamo tienes que esforzarte el doble. No es lo mismo que el equipo adquiera tu pase porque ahí tienes más confianza. Pero lo que ya ocurrió no me inquieta. Agradezco a Dios porque me brindó esas oportunidades y tengo las puertas abiertas para regresar.
¿Por qué no dio el salto al equipo de Primera del Madrid?
Dejé el Madrid y regresé a Ecuador por cuestiones personales. Y tuve algunos inconvenientes que no vale recordarlos. Llegué al país para jugar en Emelec y ahí fue difícil… Pero ahora estoy en Independiente y me encuentro feliz de haber superado problemas.
¿Se ha planteado volver al balompié de Europa?
Mi ventaja es que poseo doble nacionalidad (ecuatoriana y española). Eso me puede ayudar a ir a Europa en cualquier momento. Hoy, me siento bien en el Independiente que me abrió las puertas en momentos complicados y estoy contento. Se verá si el próximo año tengo opciones de salir.
Pero ¿usted siente que su nivel de juego es óptimo para volver a una liga europea?
Debo elevar mi nivel. Pero estoy capacitado para hacerlo. Tengo una edad (23 años) en la que aún puedo mejorar. El anterior entrenador no me daba la confianza suficiente. Ahora, tengo más chances de jugar y eso se ha reflejado en los últimos partidos. He subido mi nivel para luchar por un espacio en la Selección y ver si puedo salir.
Antonio Valencia es un caso excepcional. ¿Cuáles han sido las claves de la adaptación del ‘Toño’ al fútbol de Europa?
Villarreal compró los derechos deportivos de Valencia y eso lo ayudó mucho. Cuando el equipo posee tus derechos tiene la obligación de buscarte un plantel. Además, Valencia se esforzó y, ahora le va muy bien en uno de los mejores equipos del mundo. Es una alegría para el país.