Liga Deportiva Universitaria de Quito mantendrá la ventaja de dos goles en la final del Campeonato Nacional que se jugará mañana (16:00) en el estadio George Capwell.
Así lo decidió el Comité Ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), una vez que rechazara, por unanimidad, la impugnación del cotejo que estos dos equipos jugaron el pasado 5 de diciembre en la Casa Blanca. Este pedido fue realizado por la alineación de un futbolista con doble identidad (Ángel Cheme Ortiz, que hasta el jueves se hacía llamar Gonzalo Chila Palma).
Los eléctricos, respaldados por la Asociación de Fútbol del Guayas (Asoguayas), pretendían que la FEF sancionara a Liga y que para el partido de este domingo no se tomara en cuenta el marcador de la semana pasada.
Para esto pidieron que se aplicara el artículo 119 del reglamento de la Comisión Disciplinaria. Ese apartado establece que: “El club en el que actuare un jugador suplantando la identidad de otro perderá los puntos que hubiere ganado, los que no se acreditarán a su contendor…”.
Para defender su tesis, Asoguayas puso a disposición de Emelec tres de sus abogados: Johnny de la Pared, Mario Tamayo y Raúl Gómez Amador. A este grupo se sumó Ecuador Santa Cruz, síndico de los millonarios.
Patricio Torres, vicepresidente de los azucenas, fue el único defensor de Liga de Quito. Su argumento fue que la sanción “no debe ser retroactiva”.
Pero el informe del asesor jurídico de la FEF, Guillermo Saltos Guale, fue determinante. Él sostuvo que el jugador albo estaba habilitado para jugar la primera final del Campeonato.