El estadio Nacional Mane Garrincha de Brasilia atraviesa serias dificultades a menos de seis meses del inicio de la Copa del Mundo de Brasil. Las fuertes lluvias que afectan al país en estos días provocaron filtraciones en el techo del escenario deportivo.
Este estadio es el más caro de los 12 que han sido construidos o remodelados para la cita deportiva del próximo año. La inversión asciende a USD 508 millones y albergará siete partidos del torneo, cuatro en la fase de grupos, uno en octavos de final, uno en cuartos de final y el duelo de definición por el tercer puesto.
Uno de los compromisos de la fase de grupos que se jugará en el Mane Garrincha es el Ecuador vs. Suiza, con el que se abrirá el Grupo E de la competición el 15 de junio a las 11:00 (hora ecuatoriana).
Los defectos del escenario se evidenciaron el pasado domingo durante un partido amistoso entre los equipos femeninos de Brasil y Chile, a propósito del Torneo Internacional de Brasilia.
Los periodistas de la localidad informaron que la parte baja de la tribuna se inundó completamente difiriendo con la versión de la Secretaria Estatal para Asuntos de la Copa del Mundo de la FIFA (Secopa) que minimizó los daños.
La Secopa anunció un pequeño percance que no afectaría el normal desarrollo de los partidos que tendrán lugar en el estadio durante el Mundial.
“Algunos puntos están siendo corregidos y controlados, pero no hay nada que comprometa el funcionamiento del estadio o la posibilidad de albergar eventos en el lugar”, informó el organismo en un comunicado oficial.
Además, indicó que el estadio tiene una garantía de cinco años por parte de la constructora y las reparaciones en el techo serán cubiertas totalmente por la compañía que dirigió la obra.
El escenario fue inaugurado en mayo de este año y un mes después alojó el encuentro inaugural de la Copa Confederaciones entre Brasil y Japón. Tiene una capacidad para 73 000 aficionados.
Este no es el único escenario de la Copa del Mundo y en el que jugará Ecuador que está siendo afectado por el temporal. El Maracaná, donde la Tricolor se enfrentará a Francia el 25 de junio a las 15:00, también presentó inundaciones.
El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, reconoció que faltan obras de infraestructura para atenuar el impacto de las lluvias que en las últimas semanas causaron 4 muertos, 2 000 evacuados e inundaron el estadio Maracaná.
“Las inundaciones me irritan, pero jamás prometí que no habrá inundaciones en el 2014, no podremos concluir la piscina de desagüe de Plaza Bandeira por lo que seguiremos con problemas”, admitió Paes.