E. Bauza vivió intensamente un partido que lo dejó sorprendido

Vestido con camisa blanca, pantalón azul y zapatos color café, el entrenador Edgardo ‘Patón’ Bauza parecía sereno, pero sus gestos mostraban lo contrario.

En esta ocasión no estuvo mucho tiempo sentado en el banco, como es habitual en él. Hizo todo lo contrario: caminó de lado a lado dentro del área técnica.

Con los brazos cruzados y masticando chicle, el ‘Patón’ vivió un cotejo intenso.

Durante los primeros ataques toreros, Bauza bajaba la mirada y esperaba que sus zagueros resolvieran las jugadas.

La primera indicación del estratega llegó en el minuto cuatro, cuando con gesticulaciones pidió a sus dirigidos que atacaran por el costado derecho, por donde corría ÉdisonMéndez.

El DT argentino miraba el reloj cada cinco minutos. Reclamaba con gestos y gritos cada decisión del árbitro Carlos Vera contra la Liga quiteña.

Bauza tomaba a pequeños sorbos el líquido hidratante. En ocasiones miraba a la banca en busca de respuestas a las imprecisiones de sus delanteros.

Cada error que cometían Méndez, Juan M. Salgueiro y Hernán Barcos era recriminado por el entrenador. Barcos fue quien más llamados de atención recibió.

Al final del primer tiempo, con un gesto de molestia, Bauza buscó rápidamente el camerino.

Para la segunda etapa, volvió sereno. Pese al fuerte sol, vestía un impermeable de color azul, con el logotipo de su club.

Esa actitud le duró poco. Minutos después asumió los mismos gestos del primer tiempo.

De nuevo, la mirada baja, la exaltación, los reclamos.

Al final, caminó veloz hacia el túnel. Quince minutos después, en la rueda de prensa, elogió a Barcelona y también se molestó cuando cuestionaron su táctica.

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