Las polémicas, las frases explosivas y los golpes de efecto ya no importan a esta altura de la temporada. José Mourinho se apresta a vivir un mes intenso, en que arriesgará todo el crédito conseguido como director técnico del Real Madrid.
En su segunda temporada al frente del Real Madrid, y con un plantel excepcional a su servicio, Mourinho deberá pasar la prueba más exigente en lo que posiblemente sea el mayor reto de su carrera: intentar destronar al dominante Barcelona.
Aunque los blancos ya tienen algunos récords, como el de anotaciones en la Liga española, aún tiene todo por conquistar. Real Madrid consiguió el sábado los 107 goles en una temporada y alcanzó su propia marca de la temporada 1989-1990 bajo las órdenes del galés John Toshack.
Ya se han ganado partidos y aplausos, pero ahora hay que ganar trofeos. El comienzo de este tramo vital comienza hoy con la visita a Múnich para medirse al Bayern en semifinales de la Liga de Campeones.
El equipo blanco nunca ganó en Múnich, donde acumuló ocho derrotas y un empate. Por ahí encuentra Mourinho una nueva motivación para satisfacer su orgullo de ganador. Y cuatro días después llegará el clásico del fútbol español ante el Barcelona, en el que se resolverá buena parte del título de la Liga española.
Aunque los blancos tienen cuatro puntos de ventaja sobre los azulgranas, un triunfo del Barcelona significaría todo un golpe moral para afrontar las cuatro jornadas finales del torneo.
El Real Madrid llega a esta etapa definitiva de la temporada con muchas dudas sobre su rendimiento, pues en los últimos encuentros no ofreció el nivel esperado y hasta acusó pequeños síntomas de ansiedad.
Los hinchas del Real Madrid y los analistas del fútbol mundial están deseando ver qué respuestas ofrece Mourinho en su intento de derribar la ‘maldición de Múnich’ y, posteriormente, conquistar el trono del Barcelona.
El técnico portugués estará especialmente ‘vigilado’ después de recibir fuertes críticas la pasada temporada y esta misma por sus estrategias ante el Barcelona. De hecho, el Madrid cayó en el primero duelo de la temporada con los ‘culés’, lo cual generó comentarios y burlas.
No solo eso, sino que al último mes de temporada se llega después de numerosos debates y especulaciones sobre la continuidad o no de Mourinho a pesar de tener dos años más firmados con el Real Madrid.
Se habla de que el portugués podría romper su contrato a final de temporada. Pero, ¿quién puede asegurar que no sea el club blanco quien decida prescindir de él si no gana títulos? En un mes habrá respuestas.
A pesar de todo esto, Real Madrid tiene un arma que podría marcar la diferencia en su pugna con Barcelona: los anotadores. Los tres goleadores del conjunto, el francés Karim Benzema, el argentino Gonzalo Higuaín y el portugués Cristiano Ronaldo suman 80 de los 107 tantos de su equipo y se han convertido en el tridente ofensivo más efectivo de la historia del Real Madrid.
En cambio, Barcelona reposa casi todas sus opciones de gol en el enorme talento de Lionel Messi, que no ha tenido un gran acompañante en la temporada. Al Barcelona le afectó la grave lesión de David Villa sufrida a fines de 2011, los repetidos problemas musculares de Pedro y Alexis Sánchez y la sequía de Cesc Fábregas, repatriado de Inglaterra.