Con tema de la Sonora Dinamita: “Ahí vienen las brujas caramba por el caminito”…, abandonaron ayer los futbolistas del Deportivo Quito el complejo Ney Mancheno, en Carcelén. A las 10:15, el lugar estaba desolado. En la puerta principal, solo Mario Galárraga, ex figura del Quito, explicaba a los periodistas que los jugadores cumplieron con su segundo día de paralizaciones.
Los futbolistas mantuvieron ayer la iniciativa que tomó forma el jueves, después de que la directiva incumpliera con el pago del 60%, correspondiente a la segunda mitad del salario atrasado de enero.
El pago de ese porcentaje se lo hizo en cheque, pero los jugadores no cobraron por falta de fondos. El pasado viernes, la directiva les había dicho que el dinero estaría listo el martes. “Nos viven mintiendo todo el tiempo”, mencionó un jugador que pidió mantener su nombre en reserva.
La directiva abonó el 40% en efectivo el pasado viernes, después de la primera paralización que se registró desde el inicio de la nueva temporada, previo al partido frente al Macará. Ayer, en cambio, ningún directivo acudió a Carcelén para dialogar. Eso elevó la molestia entre los pupilos de Insúa.
Galárraga se mostró apenado, ya que hoy Deportivo Quito enfrenta a Universidad Católica por la séptima fecha del torneo. El partido está programado para las 18:00, en el estadio Olímpico Atahualpa. “Y hoy que íbamos tan bien”, comentó en voz baja el ex jugador.
Tras seis fechas disputadas, el plantel quiteño se ubica en el segundo lugar de la tabla de posiciones, detrás del líder, Emelec.
La decisión de continuar con la huelga de ‘botines caídos’ se la tomó ayer, después de 30 minutos de conversaciones. Tal como lo habían acordado la tarde anterior con Insúa, los jugadores llegaron ayer a las 09:00, pero al no encontrar a ningún directivo, tomaron sus maletas, encendieron sus coches y se fueron del complejo.
Los primeros en salir fueron Fabián Carini, Roberth Flores, Federico Nieto. Entre los últimos estuvieron Luis Checa, Walter Calderón, Álex Colón, Santiago Morales y Édison Vega.
De la radio del carro de este último se desprendió el reconocido tema de la Sonora Dinamita. Antes de cruzar la puerta del complejo, Vega se despidió de Colón. Checa, en cambio, salió del lugar junto a su padre. Calderón lo hizo en su Hyundai Tucson de color concho de vino.
‘Mamita’ le comentó a Galárraga que sí asistirán hoy al estadio Atahualpa. “Nos vamos no más directo al Atahualpa”, mencionó.
Fuera de las molestias económicas, Insúa cuenta con todos sus jugadores para afrontar el juego frente a la ‘Chatoleí’. “Están en perfectas condiciones, ninguno está lesionado”, comentó Insúa.