Los 12 equipos debutaron en la Copa América y parece claro que los mundialistas del 2010 todavía están con la resaca de su aventura por Sudáfrica. Todos excepto Chile, el único que luce intacto un año después. En su primer cotejo mantuvo su estilo bielsista: irrenunciablemente ofensivo, vistoso, con toque, pero con una significativa falta de precisión en el paso final. Claro que el rival fue México, un equipo desarmado, improvisado y que ya hizo bastante con anotar el gol de apertura y complicar a Chile. Pero la Roja hizo las tareas, fue el dominador absoluto del cotejo y ganó los puntos.
Se verá si los chilenos tienes combustible para avanzar más lejos en la Copa. Una derrota el viernes, ante Uruguay, les borraría la sonrisa. Pero es envidiable que, al menos, han sacado ventaja de los logros de sus divisiones juveniles para apostar por un proceso de renovación que hoy sigue vigente. Los jugadores que fueron a los mundiales Sub 17 y Sub 20 no se perdieron en el camino. Resultado: Chile fue al Mundial del 2010 con un plantel en plena ebullición. Un año después, Chile jugó ante México, por primera vez en la historia de la Copa, con una alineación titular totalmente conformada por elementos que militan en el exterior. Chile no deja de crecer, aunque es verdad que sus jugadores no son tan técnicos ni talentosos como los argentinos.
Un ejemplo que Ecuador debería imitar, tomando en cuenta que este año, las Tricolores Sub 17 y Sub 20 tienen experiencias mundialistas. Ahí está la semilla de la renovación que tanto espera el hincha ecuatoriano. Que no pase lo del Mundial Sub 20 de hace una década, cuyos jugadores ecuatorianos no alcanzaron a formar parte de los equipos del ‘Bolillo’, de Suárez ni de Vizuete. Se perdió una generación. El destino nos regala nuevas semillas. Ojalá que no las boten a la arena.