Hace dos años Xavier Rodríguez, entrenador de la Selección Sub 17, y su cuerpo técnico fueron enviados por la FEF a recorrer el país para reclutar a jugadores menores de 15 años. Ellos formaron el combinado nacional de esa categoría que participó en el Sudamericano de Bolivia.Los entrenadores asistieron a partidos del fútbol amateur en las provincias y también fueron a los cotejos del Campeonato Sub 15 que organiza la Ecuafútbol.
De esa búsqueda salieron jugadores como Luis Batioja, Walter Chávez, José Francisco Cevallos, Júnior Sornoza, entre otros.
La idea era que ese grupo se mantuviera trabajando con Rodríguez, para que sea un equipo consolidado en la Sub 17 de este año. Hoy, 15 de los 20 seleccionados que forman la nómina de la Tricolor están desde el 2009.
Luis Batioja, delantero esmeraldeño de 16 años, es uno de los que inició el proceso y se convirtió en el delantero titular.
‘Bati’, como le dicen sus compañeros, pertenece a las formativas de Liga de Quito, adonde llegó en el 2008 con 14 años.
Antes de vincularse a la ‘U’, Batioja se probó en El Nacional, club en que no se quedó porque la dirigencia no le consiguió un lugar en donde vivir, ya que en Quito no tiene familia.
Batioja llegó solo a Pomasqui y le pidió a Eduardo Stelik, ex coordinador de las inferiores, que le permitiera probarse y se quedó.
Desde el 2010 firmó un contrato por tres años con Jorge Guerrero, quien lo representa.
El atacante, al que le gusta dejarse los churos en su peinado, es un jugador potente que tiene buen dominio de balón y que se destaca en el juego aéreo.
Esas condiciones contribuyeron para que Rodríguez se fijara en él. Para que un futbolista sea seleccionado tiene que tener buena técnica, señaló Gonzalo Alcócer, asistente técnico.
Batioja es uno de los cinco jugadores que Liga aporta a la Selección. Los albos cuentan con ‘scouts’ que recorren el país tras nuevos talentos. Walter Fiori, coordinador de las formativas, es quien recibe los informes y también viaja a torneos juveniles para fichar futbolistas.
Uno de los jugadores que se integró el año pasado a la Selección es Carlos Armando Grueso. Él es delantero, como su padre (Carlos), quien jugó en Barcelona y Espoli en la década del 90.
Grueso fue descubierto por Marco Zambrano, quien es su agente y también es el principal cazatalentos del Independiente del Valle, que alimenta su cantera con jugadores de Esmeraldas, El Chota y Guayas, principalmente, en donde tiene filiales.
Según Santiago Morales, gerente del club de Sangolquí, los jugadores que llegan desde Guayaquil primero se entrenan en el club Norteamérica, que es un aliado. Solo los más destacados son llevados al complejo de la institución, en donde también terminan la secundaria con profesores contratados por el club.
José Francisco Cevallos, hijo, está en Liga desde los 13 años, y esta temporada debutó en la Serie A. Él se incorporó al cuadro universitario en el 2008, pero no porque alguien lo llevó, sino que llegó con su padre, José Francisco, quien fue contratado por los albos. La seriedad de Liga para formar futbolistas influyó en Cevallos y en su hijo, para que el chico hiciera su carrera en la ‘U’.
Cevallos no será titular en el equipo de Rodríguez, pero el DT lo considera fundamental para darle un rumbo nuevo al juego de Ecuador, cuando los partidos se compliquen.
‘Cevallitos’ convive en la concentración con su tío Alex Cevallos, preparador de arqueros. Alex le pidió que conservara la calma y que aprovechase todos los minutos que Rodríguez le dé.