Universidad Católica y Barcelona están en pugna por Geovanny Nazareno. El club celeste asegura que los derechos deportivos del futbolista le pertenecen por tres años más. En cambio, los toreros reclaman que el deportista firmó un contrato hasta diciembre del 2011.
Nazareno actuó esta temporada en el equipo amarillo y, según Católica, su vinculación con ese club terminará el 31 de diciembre de este año y, por eso, deberá regresar al conjunto ‘camaratta’.
Así, según Egas, su club tiene la potestad de negociar sus derechos deportivos a otro plantel. El directivo admitió que la intención era transferirlo a Liga.
Sin embargo, Alfonso Harb, presidente de la Comisión de fútbol de Barcelona, argumentó que el marcador zurdo renovó su contrato con el plantel por un año más, hasta el 2011. Esta versión la dio anteayer en la presentación de los nuevos refuerzos toreros.
Incluso, Harb dijo que su equipo ha sido víctima de un supuesto chantaje para que el futbolista dejara el plantel. El dirigente no precisó detalles ante la insistencia de los periodistas.
Egas ha realizado llamadas al teléfono móvil del jugador, pero no ha recibido respuestas.
Así, el futuro del lateral para la próxima temporada es incierto. Rodrigo Espinosa, quien lo representa, dijo ayer que en caso de que no existiera una solución al conflicto, el problema deberá resolverlo la Federación Ecuatoriana de Fútbol. También confirmó que el lateral tiene un contrato vigente con Universidad Católica.
Espinosa no ha mantenido contacto con el jugador los últimos tres días, según él. “Por eso, no hemos podido resolver el tema”.
Deportivo Quito también estaba interesado en contratar al futbolista, que este año fue convocado por Reinaldo Rueda para partidos amistosos. Sin embargo, la Directiva lo descartó.