Iván Hurtado había trotado 10 minutos cuando empezó a sentir un dolor intenso en los músculos gemelos de su pierna derecha. Inmediatamente se detuvo y se sentó a un costado de la cancha alterna de entrenamiento Sigifredo Chuchuca.
El ‘Bam Bam’, como se lo apoda al defensa de 36 años, se tomó la rodilla con sus dos manos y el médico Bosco Mendoza lo empezó a revisar detenidamente. Según el galeno, el jugador tiene inflamados los músculos gemelos. Esa lesión, que lo aqueja desde el año pasado, le impediría jugar el partido del próximo miércoles contra el Deportes Tolima, de Colombia, en la Noche Amarilla.
Mendoza explicó que Hurtado, antes de ser contratado por la dirigencia amarilla, advirtió que recién se había operado de los meniscos e inmediatamente fue sometido a una resonancia magnética en la que “se detectó un proceso inflamatorio crónico”.
Como parte de su rehabilitación, los médicos le han aplicado un sistema de ondas, que es una tecnología fisiátrica, que permite desinflamar más rápido.
Además, les comunicó que sentía un dolor leve en los músculos gemelos de su pierna derecha. Esa lesión le permitió entrenar únicamente una semana.
La recuperación del futbolista está prevista en dos semanas. Es decir, que podría debutar con los amarillos en el inicio del Campeonato Ecuatoriano de Fútbol, el 30 de enero.
En el mismo lugar donde se sentó Hurtado estaba también el arquero Máximo Banguera. Él no podía entrenarse con el resto de sus compañeros debido a una rotura fibrilar en su pierna izquierda. Según Mendoza, esa lesión se generó en una de las pruebas físicas a la que los jugadores fueron sometidos la semana pasada en el Centro Olímpico de Alto Rendimiento (COAR).
Una ecografía que los galenos del club le realizaron la tarde del lunes pasado confirmaron que la ruptura tiene una dimensión de un centímetro. Eso lo obligó a dejar los entrenamientos y a empezar una rehabilitación que se extenderá por lo menos una semana, según reveló el jugador.
Por otra parte, el presidente Alfonso Harb explicó ayer que el cierre de las oficinas administrativas del equipo responden a una reestructuración integral del personal que ahí laboraba.
Ayer, las puertas de las dependencias ubicadas en el estadio Monumental permanecieron cerradas. Un guardia custodió durante la mañana las puertas de acceso que se encuentran junto a la avenida Barcelona. Según explicó, nadie estaba autorizado para entrar a esa área.
Junto al ingreso a esa zona, en un cartel, se explicaba que las oficinas habían sido cerradas indefinidamente “por orden de la presidencia y hasta un nuevo aviso”.