Ecuador se apresta a abandonar, en los próximos minutos, el hotel Campo Colón, sitio de concentración que ocupó desde el miércoles. El plantel se traslada al hotel Río Grande.
El seleccionado ecuatoriano dejó las instalaciones ante la inminente llegada de Argentina, que mañana juega con Colombia, y que hoy llega a Santa Fe.
Uno a uno, los jugadores empezaron a subirse al bus. También lo hizo Luis Antonio Valencia, pero tenía mucha dificultad para movilizarse, según constató este Diario. Cojea mucho, tras haber sido golpeado el pasado domingo en el partido ante Paraguay. El golpe es en la zona del tobillo izquierdo, en donde se lesionó el año pasado y estuvo seis meses fuera de la cancha.