Joven, talentoso y disciplinado. Ese es el legado que dejará la Selección alemana a futuro. El mismo ‘Kaiser’ Franz Beckenbauer lo reconoce: “Es un equipo muy bueno para verlo. Nadie en Alemania esperaba verlos jugar tan bien”.
Esta fue una magnífica oportunidad para que el equipo demuestre la excelencia de una Selección alemana y el nivel que pueden dar. Cuenta con jugadores que se conocen bien, lo que se ha evidenciado en la cancha.
Alemania exhibe esa característica sincronización y rigidez europea, pero también posee un toque de talento, por los aportes de futbolistas polacos (nacionalizados alemanes), como Lukas Podolski y Miroslav Klose, polacos. También, muchos jóvenes se ven influenciados por la nueva forma de interpretar este deporte, espectacular y mágico.
Para Becknbauer, el técnico Joachim Löw tuvo “la valentía de darles la oportunidad a jóvenes talentos que pudieron responder al desafío de jugar con la Selección en el Mundial”.
Félix Borja, delantero ecuatoriano que milita en el club Mainz 05 de la Bundesliga alemana, confirmó a este Diario ayer, vía telefónica, que “se siente la influencia de otros estilos diferentes al alemán. Hay futbolistas africanos, sudamericanos, holandeses… y eso se nota en los estilos de juego de los clubes. Creo que eso se tradujo también al patrón de la Selección”.
Uno de los jugadores más destacados es Bastian Schweinsteiger, “una mente brillante para dirigir el mediocampo de Alemania”, califica Borja. Su presencia ha hecho olvidar la ausencia por lesión del referente Michael Ballack.
Otros cuatro jugadores también quedaron fuera por lesiones, lo que provocó que Löw eligiera a un plantel con un promedio de edad de alrededor de 25 años, entre ellos un núcleo de seis jugadores que ganaron la Eurocopa Sub 21 en el 2009.
“Los alemanes son muy metódicos, analíticos y precisos. Saben cómo unir el talento con la fuerza. Por eso creo que Alemania se mostró como un equipo sólido en este Mundial. Además, tiene un plantel para llegar con mayor experiencia al próximo torneo”, expresó Sixto Vizuete, técnico encargado de la Tricolor, quien se formó como entrenador en ese país.
A esto, Borja agregó que “ya no existen las barreras raciales como antes. En realidad, los alemanes dejan jugar al que está en mejor estado físico y futbolístico”. El ‘Cangurito’ lo dice con conocimiento de causa, pues sufrió una lesión que lo marginó en su club.
Seguramente ahora, nombres no tan conocidos antes de la cita ecuménica como los de Sami Khedira, Thomas Muller, Mesut Ozil, Jerome Boateng, Toni Kroos y Holger Badstuber, entre otros, atraerán la atención de grandes clubes europeos. Y tienen al menos dos mundiales más por jugar.
“Solo han estado jugando juntos en este equipo por seis o siete semanas. España lo ha hecho por dos o tres años. Nadie debe agachar la cabeza. Este equipo seguirá así (junto) después de que el torneo termine”, indicó Löw, tras la eliminación.