Fútbol con jugadores sin salarios

El fútbol ecuatoriano es emotivo, y fácilmente envuelve a sus hinchas y a sus dirigentes. Una muestra es lo que se vive en estos días, donde el interés se centró en los equipos que disputan la etapa y los cupos a los torneos internacionales.

Los reclamos de los futbolistas por salarios atrasados, en muchos clubes, incumplimientos de estos en el pago de alquileres de departamentos, dobles contabilidades en los aportes a la Seguridad ­Social e impuestos reflejan la frágil estruc­tura en la
que se sostiene el fútbol del país.

Eso es inadmisible e insostenible. No se puede seguir operando de esa forma, sin que haya reacciones de los dirigentes de los clubes, asociaciones y de la Federación Ecuatoriana.

Es vergonzoso que los futbolistas recurran a vender boletos, organizar rifas y bingos para poder pagar sus propios salarios. Pero no tienen opciones, porque las organizaciones que vigilan los campeonatos optan, usualmente, por el silencio, sin valorar el esfuerzo de los deportistas.

Los dirigentes de Liga, Barcelona, Emelec e Independiente, por su influencia en la sociedad, están en la obligación de proponer opciones para ir, progresivamente, encontrando soluciones o viendo un nuevo modelo administrativo. El actual es caduco y permite que historias que viven futbolistas de Fuerza Amarilla y de Liga de Loja se repitan con frecuencia. Tal vez, un campeonato en la Serie A solo con 10 equipos sea lo más adecuado, pero para eso habría que reestructurar el contrato con la operadora de TV pagada, Goltv.

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