Ismael Blanco anotó los dos goles con los que Barcelona Sporting Club derrotó al Aucas. Foto: Gabriel Proaño / EL COMERCIO
Barcelona Sporting Club quiere continuar en la Copa Libertadores no solo por su prestigio internacional, sino también por el ingreso económico que se genera por participar en este torneo.
Solo en la fase de grupos, la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) entrega USD 900 000 por tres partidos de local; a eso debe sumarse los valores que se generen por venta de boletos y pautaje publicitario.
Clasificar a los octavos de final, le significaría a Barcelona un ingreso de USD 550 000, rubro que entrega la Conmebol en esta instancia.
Mañana, 9 de abril, los amarillos se juegan “una final”, cuando midan a Libertad de Paraguay, en Asunción, por la quinta fecha del grupo 7 de Libertadores. Si el equipo canario no gana en su visita a territorio guaraní, quedarían eliminados del torneo.
Los amarillos perdieron en sus tres primeras presentaciones coperas, esto los ubicó en el último puesto de su grupo, pero la victoria sobre Atlético Nacional en Colombia, y el revés de Libertad ante Estudiantes del La Pata, le devolvió las ilusiones al equipo que dirige Rubén Israel.
Si los canarios vencen al cuadro ‘gumarelo’, tendrán que jugarse la clasificación a la siguiente fase, cuando reciban en el estadio Monumental a Estudiantes de La Plata, el próximo 21 de abril. Los argentinos derrotaron a Barcelona 3-0 en el juego de ida.
“Nosotros no hemos perdido de vista los objetivos, sabemos que debemos ganar los dos juegos que restan para poder seguir en competencia”, mencionó Israel, cuando se le consultó sobre la continuidad del equipo en la copa.
El estratega alineará a lo mejor de su plantilla ante los paraguayos, la única duda que maneja el DT charrúa, es la titularidad de Matías Oyola. El registra un golpe en su pantorrilla izquierda y viajó a Paraguay con observaciones médicas, debido a su dolencia.
Según dio a conocer el estratega, ante los guaraníes se planteará un partido similar al que se hizo ante Atlético Nacional, en Colombia. Barcelona presionaría en terreno rival, para cortar los circuitos de juego que proponga Libertad.