Imagen tomada del portal El País de España.
El triunfo del FC Barcelona ante el PSG por la UEFA Champions League, la tarde del pasado 9 de marzo del 2017, produjo un sismo en la ciudad de Barcelona, en el sentido estricto de la palabra.
Un sismógrafo ubicado en una zona cercana al Camp Nou registró los movimientos que los hinchas del equipo ‘culé’ generaron en el escenario deportivo cada que celebraron un gol.
Según asegura el Diario El País de España, los cinco primeros goles del partido se registraron igual a lo de otros compromisos del cuadro ‘azulgrana’, es decir las líneas del sismógrafo no marcaron mucha diferencia. El movimiento más fuerte se sintió en el sexto gol, según aseguró Jordi Díaz, sismólogo del Instituto de Ciencias de la Tierra Jaume Almera.
El delantero uruguayo del FC Barcelona, Luis Suárez, patea el balón durante el partido de los octavos de final entre el FC Barcelona ante el Paris Saint-Germain FC en el estadio Camp Nou de Barcelona el 8 de marzo de 2017. AFP
Díaz confirma que este tipo de movimientos comúnmente, son registrados por los sismógrafos, pero que la mayoría de las personas no los sienten porque son de corta duración. Aunque las señales de las ondas sí están registradas. Este tipo de registros también se sienten en conciertos o eventos masivos realizados en el Camp Nou.
Según describe el sismólogo catalán, los goles de Luis Suárez (3’), Layvin Kurzawa (40’) y Lionel Messi (50’) no se registraron con mayor intensidad, el ambiente se enfrió aún más cuando Edinson Cavani (62’) descontó para el Paris Saint Germain, con ese resultado los catalanes se quedaban fuera de la Champions.
Los dos goles de Neymar (88’ y 91’) tampoco marcaron diferencia. Pero al minuto 90+5′, cuando Sergi Roberto marcó el sexto tanto, el de la clasificación, el Camp Nou estalló en un movimiento que fue marcado en el sismógrafo con una línea más larga, que resalta frente a las otras.
Jordi Díaz confirmó que es muy complicado el medir la intensidad de este movimiento en la escala de Ritcher, la que comúnmente se usa para catalogar los sismos, por la corta duración del mismo. “Es una vibración que la gente no notaría a un centenar de metros, porque se atenúa pronto”, afirmó el experto al Diario El País de España.