Un entrenamiento del Deportivo Quito. Foto: Pavel Calahorrano / EL COMERCIO
El año pasado, el presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), Luis Chiriboga, aseguró reiteradamente que el balompié nacional no estaba en crisis. Que todo dependía de las gestiones de los directivos de los clubes, no del ente que él lidera.
Esta temporada, los problemas económicos se mantienen en los equipos, que forman parte del fútbol ecuatoriano. A continuación, un recuento de los hechos que denotan esta crisis.
Barcelona Sporting Club en un entrenamiento en Guayaquil. Foto: Archivo
Barcelona Sporting Club
El 23 de junio, en la FEF se confirmó la pérdida del punto que sufrió el cuadro canario por no presentar los roles de pago de sus jugadores. Anteriormente, los integrantes del plantel también manifestaron que estaban impagos y buscaron paralizarse. Incluso, el técnico uruguayo Guillermo Almada no pudo debutar en la reanudación del torneo porque los toreros aún no presentaban la documentación requerida.
Los jugadores de Liga de Loja durante una práctica en el estadio Reina del Cisne. Foto: Archivo
Liga de Loja
El 4 de julio, Liga de Loja no se presentó en su estadio ante El Nacional, por la fecha 21 del Campeonato Nacional. Esto, debido a que los jugadores protestaron a la directiva el pago de sus salarios atrasados y adoptaron esa medida. Una nueva no presentación enviará al cuadro sureño a la Segunda categoría. Mientras tanto, perdió el partido con 3 goles en contra, que fueron a favor de los criollos. Antes, se dio la renuncia del DT Julio Toresani, argumentando que la crisis económica lo obligaba a tomar esa decisión.
Los jugadores del Deportivo Quito a la salida del comedor. Foto: Carlos Rojas A. / EL COMERCIO
Deportivo Quito
El 3 de julio, a las oficinas del cuadro chulla llegó una orden se suspensión para jugar su partido del sábado 4 ante Independiente del Valle. Esto, debido a la exigencia en el pago de una deuda de parte del futbolista Omar Andrade, quien actualmente milita en Aucas. La directiva azulgrana se apresuró y llegó a un acuerdo con el volante y pudo levantar la suspensión y, posteriormente, ganar su partido. Pero, previamente, los jugadores también lamentaron ante los medios el estar impagos en sus salarios. Además, la crisis económica generó la renuncia del DT uruguayo Tabaré Silva, antes de la paralización del campeonato por la Copa América.
El delantero ecuatoriano Carlos Garcés a la salida de un entrenamiento con el Deportivo Cuenca. Foto: Manuel Quizhpe / EL COMERCIO.
En el 2014: Deportivo Cuenca vendió el complejo de Patamarca para pagar sus deudas; Deportivo Quito tuvo una no presentación; hubo paralización del torneo de parte de los jugadores y con el apoyo de la Asociación de Futbolistas del Ecuador; se ventiló como posibilidad la idea de organizar un torneo nacional independiente de la FEF, pero finalmente la idea fue desechada. Estos fueron los hechos más destacados.