Ismael Blanco (9) del Barcelona Sporting Club se eleva para rematar de cabeza el balón ante la marca de Marcos López (25) del Deportivo Cuenca. Foto: Mario Faustos/ EL COMERCIO
Este año no se han registrado empates en Clásicos del Astillero. Emelec ganó los dos que se disputaron en la primera etapa (2-1 y 2-0), mientras que Barcelona Sporting Club se impuso en el primer duelo del segundo semestre (1-0).
En esta temporada, los números han sido favorables para los dirigidos por Gustavo Quinteros; ellos han marcado cuatro goles, mientras que los amarillos solo han anotado dos veces.
Desde la creación del campeonato ecuatoriano de fútbol, Barcelona Sporting y Emelec se han enfrentado en 204 oportunidades. Los amarillos se impusieron en 64 ocasiones, mientras que los azules obtuvieron 61 victorias. Se registran 79 empates.
En esos partidos los canarios marcaron 221 goles, mientras que el conjunto eléctrico anotó 216. La década de mayores triunfos amarillos fue entre 1981 y 1990. En ese periodo de tiempo, se jugaron 38 clásicos, en los que el conjunto torero se impuso por 19 ocasiones, mientras que los eléctricos solo lograron 8 victorias.
Desde 1991 hasta el 2000, la gloria fue para los azules. Emelec ganó 13 de 42 partidos, mientras que Barcelona Sporting Club se impuso en 8 cotejos. El máximo goleador en la historia de los clásicos es Lupo Quiñónez. Él anotó 13 goles en el ‘Partido Inmortal’ (10 con Emelec y 3 con Barcelona Sporting Club). El esmeraldeño se retiró del fútbol en 1990.
Para el partido de este miércoles 19 de noviembre, los dos equipos tienen dos dudas en sus plantillas, ambas por lesión. En Emelec, Miller Bolaños aqueja un desgarro en su muslo derecho; en el conjunto torero, Cristian Penilla volvió a acusar dolor en uno de los dedos de su pie diestro.
Bolaños fue descartado por el fisioterapeuta del equipo, Tony Ocampo. Sin embargo, el preparador físico eléctrico, Rodrigo Figueroa, espera recuperarlo para el miércoles. El caso de Penilla es diferente, él ya jugó el sábado pasado ante Deportivo Cuenca, pero su dolencia estaría impidiendo su óptimo desempeño.