El estadio Monumental de Barcelona Sporting Club. Foto: Ronald Ladines / EL COMERCIO
El cuerpo técnico de Barcelona Sporting Club quiere plantear un partido rápido ante Emelec y por eso el estratega, Rubén Israel, ordenó mojar la cancha del estadio Monumental, antes del Clásico del Astillero, que arrancará a las 16:30.
Una hora antes del encuentro, los empleados del club instalaron las mangueras y los aspersores, para regar el campo de juego, donde se jugará la edición 209 del clásico porteño. Esta es la primera vez que se moja la cancha antes de un encuentro, en este año.
Mientras eso ocurría, los hinchas libraban una batalla de barras. La bandeja inferior de la general sur fue la primera localidad en llenarse, allí se ubican los miembros de la barra Sur Oscura. Los hinchas azules ocuparon la preferencia y llegaron en un número aproximado de 5 000 personas.
Los aplausos y cánticos amarillos opacaron a los visitantes, cuando su equipo saltó a la cancha, para realizar el calentamiento. Damián Lanza fue el primero en salir del camerino, para realizar su preparación.