Imagen de Issa Hayatou, presidente de la Confederación Africana de Fútbol, tomada de la cuenta de Twitter Journal du Cameroun @JournalduCamENG
Issa Hayatou, fue juzgado tres días antes de presentarse a la reelección como presidente de la Confederación Africana de Fútbol (CAF).
El Comité de Auditoría de la FIFA remitió una denuncia ante el Comité de Ética solicitando su inhabilitación al estar imputado en un proceso penal por prevaricación.
Ser el primer dirigente de alto rango del fútbol mundial en ser llevado ante un tribunal penal para responder de sus supuestas prácticas corruptas en la adjudicación de los derechos televisivos en el continente africano, no impedirá a Issa Hayatou presentarse el próximo jueves a su enésima reelección como presidente de la Confederación Africana de Fútbol (CAF).
Precisamente, dicha coyuntura ha sido la excusa aducida por el hombre que sustituyó a Joseph Blatter al mando de la FIFA de forma interina, tras ser suspendido por el Comité de Ética en 2015, para eludir sentarse en el banquillo de los acusados en la ciudad de El Cairo (donde se encuentra la sede de la CAF).
El veterano dirigente camerunés, vicepresidente primero del nuevo Consejo del máximo organismo del balompié mundial que preside Gianni Infantino, se encuentra desde fines de la pasada semana en Addis Abeba, donde tendrá lugar estos días el Comité Ejecutivo de la CAF, que concluirá el jueves 16 con la elección del nuevo presidente del fútbol africano, a la que, además de Hayatou, concurre el presidente de la Federación de Madagascar, Ahmed Ahmed.
Con una trayectoria marcada por la sombra permanente de la corrupción, Hayatou atraviesa por el momento más delicado a lo largo de sus 29 años al mando del balompié de su continente. La investigación llevada a cabo por la Autoridad Egipcia de la Competencia (AEC) destapó a comienzos de este año las supuestas prácticas ilícitas tanto del dirigente camerunés como de su secretario general, Hisham Amrani, a la hora de adjudicar los derechos de retransmisión de todas las competiciones auspiciadas por la CAF.
El citado organismo denunció ante la Comisión Africana de la Libre Competencia (COMESA) a sendos dirigentes y solicitó a las autoridades egipcias la revocación inmediata del contrato de larga duración (12 años) firmado en 2016 con la empresa francesa ‘Lagardère Sports’ ante la falta total de cumplimiento de las leyes para la protección de la libre competencia internacional por parte de la CAF.
La investigación llevada a cabo durante más de medio año por la AEC descubrió que la compañía gala llevaba un par de décadas beneficiándose de los favores de Hayatou, quien le adjudicó previamente a dedo, cuando se llamaba ‘Sport Five’, otros dos contratos.
El Tribunal de Delitos Penales de El Cairo admitió a trámite la pasada semana la petición de la fiscalía de juzgar a Hayatou por los cargos de violación de la ley de la competencia y fomentar el monopolio tras confirmarse que la CAF había adjudicado el nuevo contrato para la explotación de los derechos de televisión a ‘Lagardère Sports’ por un valor de USD 1 000 millones, ocultando a su propio Comité Ejecutivo la existencia de una segunda oferta, realizada por la empresa ‘Presentation Sport’, cuya cuantía superaba en 200 millones a la presentada por la compañía propiedad de Jean Claude Darmoun.
Ante la gravedad de las pruebas incriminatorias contra Issa Hayatou, el Comité de Auditoría de la FIFA remitió el pasado día 8 de marzo una queja formal a la oficina de investigaciones del Comité Ético en un intento de conseguir su inhabilitación y, por ende, su exclusión de la carrera electoral que culminará este jueves. Dicha petición, sin embargo, fue desestimada ante la extrema cercanía del proceso y atendiendo a la presunción de inocencia de Hayatou.