Julián López, ‘El Juli‘, ha sido el gran triunfador de la segunda corrida de Olivenza (Badajoz) tras cortar cuatro orejas y un rabo, mientras que Antonio Ferrera, que fue premiado con las dos orejas del quinto toro, no pudo acompañarle en la salida a hombros tras resultar herido.
Ocho toros de Garcigrande y Domingo Hernández. En general bien presentados y con juego desigual. Antonio Ferrera, ovación y dos orejas. Julián López, ‘El Juli‘, dos orejas, y dos orejas y rabo. José María Manzanares, ovación y ovación tras aviso. Miguel Ángel Perera, ovación tras aviso y ovación.
En la enfermería fue operado Ferrera de herida inciso contusa de unos 13 centímetros de longitud en la cara posterior del muslo izquierdo, que interesa piel, tejido celular subcutáneo y fascia. Pronóstico grave. Ferrera apechó con un toro con cara y calidad, al que consiguió meter en la muleta.
Con el quinto entusiasmó en el tercio de banderillas, que fue lo más aplaudido de la tarde. Espoleado por el triunfo ya conseguido por su compañero El Juli, instrumentó Ferrera una faena de muleta vibrante y emocionante ante un toro nada fácil. Faena de mucha verdad de Ferrera, que acabó herido a la hora de entrar a matar. Dos orejas sin discusión. Tras el arrastre pasó por su propio pie a la enfermería.
El Juli se lució con el capote como antesala a una faena dominadora y torera ante un toro soso y “bobalicón”. Con elegancia y mando toreó al sexto, toro bravo, noble y con transmisión, que no cesó de embestir, que permitió a El Juli torear a placer. Alargó en demasía la faena, posiblemente en busca de un indulto que no fue solicitado. Al final agarró una buena estocada, lo que le valió las dos orejas y el rabo del animal.