El novillero ecuatoriano José Antonio Bustamante, que participaba en la novillada de la Feria de San Marcos de Aguascalientes, en México, recibió una cornada limpia de dos trayectorias.
Según la página web Altoroméxico: “Después de tanto picar piedra, finalmente José Antonio Bustamante ha recibido la oportunidad, consciente de ello para recibir a su primer enemigo ofició elegantemente con el capote, mientras que su participación con la muleta no ha sido lo que él hubiera querido, ya que el astado presentó complicaciones por el pitón derecho. Por su voluntad, escuchó una ovación. El quinto de la tarde ha sido un novillo emotivo y repetidor, aunque con una embestida descompuesta, con la cual el de Ecuador dibujó estéticas verónicas y un ajustado quite. Con la muleta, las cosas fueron de menos a más; un escalofriante cambiado por la espalda fue el preámbulo para interminables series por ambos pitones, en los que una joven afición aquilató las buenas maneras de Bustamante. Lamentablemente a la hora de tirarse a matar, por cierto con mucha determinación, fue prendido y recibió una cornada”. El parte facultativo dice que Bustamante sufrió una cornada de dos trayectorias (de ocho y seis centímetros) en la parte interna del muslo derecho, cuando entró a matar al cuarto no- villo. Fue estabilizado en la enfermería de la plaza y trasladado a la Clínica Guadalupe para ser operado.
Se lidiaron seis novillos de Jorge de Haro, uno de Castorena y otro de Ojo de Agua (sobreros sustitutos) desiguales en presentación y juego. Paco Velásquez cortó una oreja.