Vestido con una camisa blanca de colores neutros, entre gris y negro en el cuello y en las mangas, con jean negro y zapatos blancos. Así se presentó el nadador Iván Enderica ante la prensa para exponer su versión sobre los dos años de suspensión por dar positivo en el control de dopaje de los Juegos Bolivarianos 2013.
Unos 30 representantes de los medios de comunicación, entre reporteros, fotógrafos y camarógrafos acudieron a la sede de la Coordinación Zonal 6 del Ministerio del Deporte en Cuenca. El salón estuvo repleto porque además llegaron amigos y familiares del deportista.
Iván asistió en compañía de sus padres Hernán Enderica y Janeth Ochoa, quienes se sentaron juntos. También llegó el médico de la Federación Deportiva del Azuay, Fabián Dávila, quien le recetó el medicamento. Entre otros personajes estuvo Luis Gómez, viceministro del Ministerio del Deporte.
Gómez abrió la conferencia de prensa. Él, a nombre del ministro José Francisco Cevallos, pidió respeto para el deportista. “Hasta este momento no hay una notificación oficial de una suspensión para Iván Enderica. Por lo tanto, estamos hablando de una suspensión temporal”.
Según Gómez, el Ministerio del Deporte sigue creyendo estrictamente en el nadador azuayo. “Sabemos que es un inocente moral, él tiene toda nuestra credibilidad”. Por ello, “el apoyo es irrestricto”.
Este Diario conversó con Danilo Carrera, presidente de la Organización Deportiva Bolivariana (Odebo), quien anticipó que la sanción de dos años es inapelable. La sustancia ingerida “fue muy fuerte, entre los más potentes anabólicos que hay. La suspensión es automática“.
El dirigente contó que las pruebas doping se hicieron a mediados de noviembre pasado en Trujillo, Perú, tras la obtención de la medalla de oro en los 5 kilómetros de los Juegos Bolivarianos. Las muestras A y B dieron positivas. En el último caso se comprobó el resultado con la presencia del deportista.
Con cierta serenidad, aunque un poco afligido, Enderica sostuvo que no ha cometido ningún acto indebido en contra de los principios morales. Insistió que aún no recibe ninguna notificación sobre una sanción definitiva. Expuso que durante sus 17 años como nadador nunca tuvo problemas parecidos.
El nadador mostró siete formularios de control ‘doping’ a los que fue sometido en los últimos años sin haberse presentado ninguna anomalía. Su aspiración es que se aplique un proceso justo, respetando sus derechos. Con firmeza advirtió que su objetivo es clasificarse a los Juegos Olímpicos del 2016 en Brasil.
Dávila, por su parte, contó que el 11 de noviembre pasado Enderica llegó a su consultorio con una afección bronquial, con abundante flema, expectoración y un poco de febrícula. Entonces se le prescribió un antibiótico para prevenir el cuadro infeccioso.
El galeno le prescribió un expectorante, el Clembroxil, una mezcla de Ambroxol y Clembuterol que posee 10 microgramos de Clembuterol. Le prescribimos 10 mililitros de la sustancia dos veces al día por tres días. Es un jarabe de uso infantil y de adultos. Se salvaguardó los ocho días previos a los Juegos Bolivarianos.
Dávila lamentó que, de alguna manera, el medicamento se fijó en el organismo de Iván y dejó rastro en su cuerpo, el cual está dando un resultado adverso. Pero, “bajo ningún punto ese medicamento fue o ha provocado una ventaja deportiva que Iván no la necesita”. El médico cuencano tiene 15 años de experiencia en control ‘doping’.
Cevallos, quien está en Santiago de Chile con motivo de los Juegos Sudamericanos, a través de su cuenta de Twitter (@panchocevallosv), escribió que tuvo una fructífera reunión con el presidente de la Federación Internacional de Natación (FINA), Julio Maglione, sobre el tema Enderica. “Nos explicó cómo se va a manejar el procedimiento en el caso de nuestro deportista Iván Enderica” El Ministro también anotó que la FINA no ha tenido ningún pronunciamiento. Lo harán en una reunión posterior. “En los próximos días el comité médico de la FINA se reunirá para analizar el expediente de Enderica”. El mismo podría incidir porque nunca antes tuvo problemas de dopaje.
El nadador de 22 años está consciente de que vive el momento más complicado de su carrera deportiva. Pero, está seguro que superará e intentará mejorar el séptimo lugar que tiene a escala mundial, obtenido el 2013 en España.
El medicamento que ingirió el nadador cuencano Todo empezó con una molestia que fue en aumento.
Tomó Clembroxil, un jarabe expectorante infantil.
Se trata de una mezcla de Clembuterol y Ambroxol.
El antibiótico era para prevenir el cuadro infeccioso.
El nadador tenía afección bronquial y flema.
Las pruebas fijan “resultado analítico adverso”.