En Deportivo Quito quedó una sensación de amargura, de rabia, de impotencia. Cayó ante Independiente del Valle y perdió el paso en la carrera por ganar la etapa. Pero, como el DT Rubén Darío Insúa refirió, quedan seis puntos y luchará hasta el final.
Los jugadores del Quito llegaron a este encuentro con mayor tranquilidad, luego de recibir parte del dinero que les adeuda la directiva encabezada por Fernando Mantilla. Sin embargo, en la cancha fueron completamente superados por el Independiente del Valle, que se prendió con el talento de los veloces y talentosos Júnior Sornoza, Fernando Guerrero, Jefferson Orejuela y Jonathan González.
Para el DT del Quito, ese resultado sí tuvo un sustento: “El desgaste físico al que nos hemos sometido y la falta de días de entrenamiento, hicieron mella en el grupo. Además, la falta de concentraciones fue una ventaja para los rivales”.
El estratega centró su malestar en las decisiones que tomaron futbolistas claves como Geovanny Caicedo, Jorge Guagua y Luis Checa de no entrenarse en los últimos días, como protesta ante el incumplimiento de los directivos en la cancelación de salarios atrasados.
El resto de jugadores tomó la misma iniciativa durante las semanas anteriores. Llegaban al complejo de Carcelén con la esperanza de ver el dinero ya en sus manos, pero no se concretaba. Entonces, decidían abandonar el sitio ante la mirada y la impotencia del estratega argentino. De hecho, Insúa reclamó varias veces esa actitud directriz, cuyos resultados se hicieron evidentes ante Independiente.
“Si se otorgan ventajas de ese tipo, el resultado es ese. Más que preocuparnos por la derrota, hay que preocuparse por hacer muchas cosas bien, que no se repitan, que no demos esas ventajas”, dijo el DT con evidente molestia.
Lo que sí ponderó fue la entrega de sus pupilos. Aunque la crisis todavía afecta sus economías, los jugadores mantuvieron al equipo siempre peleando en la parte alta de la tabla. Todavía tienen posibilidades de terminar como líderes de la etapa, pero, siempre y cuando Emelec tropiece y ellos ganen sus dos últimos cotejos.
“Quedan seis puntos y los vamos a disputar con seriedad. Pero, en Deportivo Quito se debe recuperar justamente esa seriedad para concentrar antes de cada partido”, sentenció al entrenador.
Al cuadro quiteño le queda la tarea de recuperar su efectividad. De eso careció en el juego contra los de Los Chillos. Dominó el balón, como es habitual en el equipo de Insúa, pero esta vez ni Álex Colón ni Federico Nieto lucieron desequilibrantes. Robert Flores tampoco trascendió y salió de la cancha para el segundo tiempo.
La defensa tampoco tuvo su mejor presentación. Checa, Guagua e Isaac Mina lucharon continuamente para contender a Daniel Angulo, Sornoza, Orejuela y González. Cada contragolpe sangolquileño desnudó la lentitud y las descoordinaciones que sufrieron los zagueros chullas.