Una de las novedades de Fiat en el Salón de Ginebra 2012 será el Freemont AWD. El monovolumen de siete plazas no deja de ser un Dodge Journey adaptado a los gustos europeos, y es del estadounidense del que hereda un sistema de tracción integral no permanente.
Es algo que algunos rivales ofrecen y que será muy valorado en algunos mercados europeos como el alemán o los nórdicos. El sistema de tracción integral únicamente se ofrece con dos motorizaciones, de diésel y de gasolina, pero antes hay que saber cómo funciona.
Cuando el tren delantero detecta pérdidas de adherencia a través del control de estabilidad, un acoplamiento electrónico decide pasar fuerza al tren trasero. El auto normalmente funciona como si de un tracción delantera se tratase, y solo cuando el eje delantero detecta poca adherencia proporciona a las cuatro ruedas (4×4).
Inicialmente, el Fiat Freemont AWD (tracción total) está disponible con el motor 2,0 litros JTDm de 170 caballos y un potente 3,6 litros Pentastar V6 con nada menos que 280 caballos de potencia.
El propulsor de diésel es la opción lógica en Europa, tiene un torque de 350 Nm entre las 1 750 y las 2 750 revoluciones para mover sus 4 583 libras de peso con soltura y consume una media de 1,9 galones por cada 100 km de recorrido. Acelera de 0 a 100 km/h en 11,0 segundos y su punta es de 184 km/h. Por su parte, el motor 3.6 Pentastar V6 no tiene sentido en el mercado europeo, se venderán apenas un puñado de unidades y muy posiblemente en mercados como el alemán, o para adaptar a GLP (gas licuado de petróleo).
Por el momento ambos motores solo se podrán asociar a una nueva caja de cambios automática de seis velocidades.
Fuentes: Fiat Press y diariomotor.com