Este compacto recibió mejoras considerables en su estética y en su equipamiento. Foto: media.volvocars.com
Volvo renovó a su modelo más pequeño, el V40. La actualización que recibió este compacto de la firma sueca lo coloca como uno de los más completos, elegantes y seguros de su segmento.
El nuevo V40 ahora tiene un aspecto más deportivo, robusto y moderno. Su estampa es más atractiva gracias a las fluidas líneas de diseño y a los modernos grupos ópticos con los que cuenta.
En el frontal se destaca la mascarilla gracias a sus reducidas dimensiones y a su forma, que se unen armónicamente con las líneas del capó y los laterales.
Los faros, con tecnología de iluminación LED, incorporan iluminación diurna con forma de una T acostada. Este es un homenaje al martillo de Thor, que también se encuentra
presente en otros modelos como
el S90 y el XC90.
En la parte posterior reluce el diseño de los faros alargados en forma triangular, vistos desde atrás. El rendimiento aerodinámico fue influyente en el momento de rediseñar a este automóvil.
El interior también copó el tiempo de trabajo de los ingenieros de Volvo. Los asientos se llevan una mención especial al ofrecer mucha comodidad y agarre a altas velocidades. El lujo, como es un sello característico del fabricante, se refleja en cada elemento del habitáculo.
Como ha sido recurrente en Volvo, la seguridad es uno de los temas sobre el que más se trabajó. El V40 tiene un amplio equipamiento para protección de sus ocupantes.
En este compacto se pueden encontrar como elementos de serie los airbags frontales, de cabeza delanteros y traseros, el de rodilla para el conductor y el de peatones. Además, dispone del capó desplegable contra atropellamientos, el sensor de presión de neumáticos, los asientos con protección contra latigazos cervicales y el sistema para evitar colisiones a baja velocidad (City Safety), entre otros dispositivos de nueva factura.
En cuanto a su motorización, este ejemplar equipa un propulsor de gasolina capaz de generar 122 caballos de potencia, asociado a una transmisión de seis cambios manual o automática, según la versión.
La aceleración de este modelo es precisa al tacto del pedal, mientras que la dirección le permite al conductor llevar el auto con gran sencillez y maniobrabilidad.
Fuente: www.elmundo.es