Camionetas, SUV e incluso automóviles se ofrecen en el país con ese combustible
Aunque desde siempre ha sido el combustible más adecuado para vehículos pesados y aplicaciones industriales, tradicionalmente el diésel nunca fue visto como un carburante óptimo para alimentar a los motores de vehículos livianos en esta parte del mundo.
A diferencia de Europa, donde la escasez de recursos causada por las dos guerras mundiales generó conciencia popular sobre los conceptos de optimización y ahorro, la mayor parte del continente Americano siguió el ejemplo estadounidense, que descartó al diésel para vehículos livianos debido a factores tales como contaminación, bajas prestaciones, ruidos, etc.
No obstante, pese a su largo retraso tecnológico en comparación con los motores de gasolina, los propulsores de diésel prácticamente llegaron a igualarlos en desarrollo en los últimos 20 años, gracias la invención y posterior masificación de sistemas como la inyección directa por conducto común (CRDI, por sus siglas en inglés), la incorporación de turbocargadores para aumentar la potencia y de catalizadores y filtros para reducir la emisión de partículas de esmog a la atmósfera.
En el país, el uso del diésel todavía es limitado entre los vehículos livianos. Foto: Archivo/ Carburando
Esto, asociado a la disponibilidad de combustibles de mejor calidad, y al hecho de que el diésel es más barato que la gasolina, ofrece un mayor rendimiento en kilómetros por galón y entrega cifras de torque más altas, dio un impulso notable a los vehículos de ese tipo en los últimos años.
En el caso de las camionetas, prácticamente todos los modelos que se venden en el mercado ecuatoriano tienen sus respectivas variantes de diésel. Algunos SUV y hasta automóviles siguen o han seguido esa tendencia.
Las nuevas tecnologías hacen de estos motores, opciones muy válidas. Foto: Archivo/ Carburando
No obstante, el uso del diésel tiene sus ventajas y desventajas, y el potencial comprador de un vehículo con variantes de diésel y de gasolina debe analizar muy bien su conveniencia antes de decidirse por una opción. A continuación, se explican las diferencias.