Cuando Marcelo Fleitas era técnico de Emelec (en el 2012), Marcos Caicedo no tuvo espacio en el equipo y fue cedido a préstamo por un año a El Nacional. Pero a inicios de este año, el mediocampista volvió al club azul por pedido del estratega argentino-boliviano Gustavo Quinteros.
En su regreso, ‘Marquitos’ (como le dicen de cariño sus compañeros) demostró que su juego mejoró. “Antes ocupaba plaza de juvenil en Emelec. Pero luego en El Nacional tuve la oportunidad de madurar”, admitió el delantero de 21 años.
El técnico Humberto Pizarro lo hizo debutar en Emelec cuanto el futbolista tenía 15 años. El DT coincide en que el Caicedo ha mejorado, sobre todo en su aspecto físico. “Con sus condiciones, es un jugador de exportación”, advirtió.
A los 15 años, el guayaquileño se inició jugando como lateral. Pero después se desempeñó como volante por el sector izquierdo y como delantero. Pizarro explicó que el jugador ha podido cumplir en diferentes posiciones por su velocidad y su resistencia.
Quinteros ha utilizado al futbolista como extremo izquierdo. A él lo acompañan Énner Valencia por el costado derecho, mientras que Marcos Mondaini y Marlon de Jesús o Pablo Zeballos han actuado en la delantera. Esto ha convertido al ‘Ballet’ en el equipo más ofensivo del torneo. Esto se evidenció el viernes en la victoria 2-1 de los azules sobre Liga, en Ponciano.
“En el equipo me siento bien. Mondaini y el resto de compañeros entienden mi juego”, se regocijó el delantero. Su compañero Énner Valencia, lo define como el salvador del equipo. Caicedo hizo honor a ese apodo el martes al anotar el gol de la victoria sobre Vélez Sarsfield en la Libertadores.
“Es un jugador que este año ha aportado mucho al equipo. Marcos (Caicedo) captó muy rápido la idea del cuerpo técnico y ahora hace muchos goles que nos han salvado”, ratificó Valencia.
Caicedo está feliz por su momento. Sus compañeros que han conocido su historia por salir de la pobreza se alegran por esto.
Antes de probar suerte en el fútbol, Caicedo fue boxeador, betunero, vendedor de caramelos y limpiador de parabrisas. Así ayudó a su mamá Ludy Caicedo a criar a sus ocho hermanos en el Barrio La Prosperina ( norte de Guayaquil).
En el boxeo tuvo un paso fugaz A los 9 años aprendió este deporte para defenderse de la inseguridad en la calle. Un amigo lo invitó a entrenarse para convertirse en púgil. Pero a su madre no le gustó la idea porque consideraba que era un peligro.
“El otro día me lo encontré en el calle y me dio gusto ver cómo ha madurado en lo personal y profesional. Es un chico sano que llegó al fútbol luego de una extrema pobreza”, contó Pizarro.
Para Caicedo, superar la pobreza y las pruebas que le ha puesto la vida le han servido para valorar su trabajo y a su familia. “Dios me puso de nuevo acá, para demostrar todas las ganas de seguir haciendo las cosas bien”, destacó.
Su propósito inmediato es guiar a Emelec al título y, luego, jugar en el exterior.
‘Marquitos’ ya sedujo con su juego a la hinchada azul, quienes no se han cansado de ovacionarlo en todos los partidos que ha jugado con el ‘Bombillo’, pero sobre todo ya se ha ganado un espacio en el esquema del estratega eléctrico.
“Antes no podíamos convertir y a veces solo marcábamos uno y con eso no alcanzaba. Ahora si lo hacemos. Marcos (Caicedo) es un gran jugador y está teniendo su oportunidad”, resaltó Quinteros.
“Marcos se adaptó al club y se volvió el salvador del equipo”.
Énner Valencia Jugador de Emelec “Antes no podíamos anotar. A veces solo marcábamos uno y no alcanzaba. Con Marcos ahora anotamos más”.
Gustavo Quinteros DT de Emelec