ENTREVISTA
¿Cómo empezó su vinculación al deporte hasta llegar a ser representante de grandes figuras del atletismo mundial?
Con unos amigos salí a correr a la calle y comencé a practicar el atletismo y me convertí en un corredor aficionado. Para inicios de los 90 fui a participar en la famosa Bolder Boulder, Colorado, me topé con uno de mis ídolos latinoamericanos, Rolando Vera, fue la luz ahí. Le vi y me acerqué. En Texas me topé otra vez con Rolando Vera, ya era una estrella, una figura del atletismo. En la ciudad era reconocido, humilde, callado, trataba de pasar desapercibido. Lo busqué para entrenar y así conocí a Silvio Guerra y a Arturo Barros, gran atleta mexicano. Ahí se inició todo, es decir entrar al deporte y al mundo de los atletas élites a escala mundial.
¿Cuándo se adentra, cómo es la vida del atleta?
Estas personas son fuertes en su consistencia física, personas con una convicción, con un deseo de avanzar, de seguir. La necesidad es la madre de todos estos éxitos, porque para la mayoría de los atletas uno de los grandes motivadores para alcanzar esos objetivos no es solamente el amor al deporte, la disciplina, el esfuerzo sino también la necesidad de sobrevivir.
Cómo fue su experiencia con el campeón Rolando Vera Rodas, pese a se estatura pequeña?
Rolando Vera fue de otro nivel. Creo que sorprendió de una manera muy positiva porque alentó a mucho atleta pequeño que tiene una constitución frágil.
¿Fue difícil ser su representante?
No es tan fácil, por eso son pocos los que hay y son menos los que se quedan en el negocio y consiguen mantenerse como profesionales con grandes triunfos en el deporte.
¿Cómo ha vivido y ha compartido estas glorias?
Muy gratificante la amistad que estos atletas me brindaron y que me proyectó para tener la oportunidad de representar a otros jóvenes atletas como Martha Tenorio, que fue la primera dama que representé.
¿Los grandes atletas ganaron mucho dinero?
Los buenos atletas han ganado mucho dinero y algunos lo han sabido administrar, otros no tanto. Varios de estos atletas han sido personas de escasos recursos, no han tenido una formación profesional o una carrera. En su momento nuestros atletas ganaron buena plata.
¿Hay otros que desperdiciaron su edad y su tiempo?
Algunos se tuvieron que retirar por lesiones por ejemplo. Una pena pero Rolando Vera se retiró en su mejor momento porque había alcanzado un punto de renombre mundial. Creo que fue cuando vino la oportunidad para él de incursionar en la política a raíz del renombre mundial que estaba adquiriendo en el deporte. Ya se había consolidado como un atleta de renombre internacional. Él había vencido a grandes competidores de distintas partes del mundo, en competencias muy importantes. La maratón de Los Ángeles y la de Seúl, Corea del Sur. Creo que lo que ya no tenía era el interés por competir, su enfoque era la motivación por la política, que fue lo que hizo.
¿Un atleta de elite cuánto ganaba?
Un atleta como Rolando solo por participar en una competencia, sin los premios si ganaba, recibía hace casi 20 años entre USD 50 000 y 150 00. A veces gana más en los bonos que los premios que se anuncian.
Hoja de Vida
Arturo Linaldi
Nacido: en México. Vive en Texas, pero recorre el mundo como empresario.
Trayectoria: Es representante de atletas y asesor de la UN 15K.