Un hincha ecuatoriano en los graderíos del Maracaná. Foto: Marcos Vaca / EL COMERCIO
.log-gg{
width:20%;
}
.log-gg img{
padding-right: 10px;
}
Ser hincha de Ecuador implica algunos riegos, uno de ellos tener que comerse las uñas. Ecuador empata con Francia en el Maracaná, pero ha hecho sufrir a los ecuatorianos que cubrieron buena parte de los graderíos del estadio de Río de Janeiro.
Los hinchas que estuvieron detrás del arco protegido por Alexander Domínguez han tenido que roer las uñas cada vez que los galos se aproximaban al aérea ecuatoriana.
Más de un insulto se ha escuchado para ver si los tricolores logran superar a los europeos. El sufrimiento se acentuó al final del primer tiempo cuando muchos se enteraron que Suiza gana su juego con Honduras.