Un forro de gel o una licra con un soporte de esponja es el accesorio que no le debe faltar a un ciclista que está aprendiendo a montar bicicleta.
¿La razón? Reduce el impacto que sufren los glúteos al tener contacto con el asiento. Por lo regular, los sillines son duros y provocan dolor al día siguiente. Ese accesorio lo venden en tiendas especializadas y se ajustan a los asientos de bicicletas para montaña y ruta. Su precio es de USD 25.
Por su utilidad, según Agustín Torres, de Ecobike, al forro se lo puede incorporar a la lista de la categoría Protección.
Los accesorios básicos para practicar ciclismo se dividen en: Protección, Hidratación e Inflado. En la primera categoría también figuran el casco, guantes, zapatos, timbre, luces, y sujetabastas -cuando el ciclista utiliza pantalón y no licra-.
De esa lista de accesorios, el casco y los guantes son irremplazables. El casco lo protege durante una caída, mientras que los guantes evitan que las manos se desprendan del volante a causa del sudor o que se llenen de callos.
Es importante que el casco se ajuste a la medida de la cabeza para evitar que se resbale y distraiga al deportista.
El casco aproximadamente tiene un año de utilidad. Sin embargo, el cambio de accesorio depende del estado en el que se encuentre antes de cada salida en bicicleta. Después de una caída la recomendación es que lo cambie inmediatamente.
La lista de la categoría Hidratación es más corta. Basta con colocar un portabotellas en su bicicleta y dentro de él, una caramañola con agua para tener un recorrido placentero, evitando la insolación.
El beneficio de utilizar un tomatodo (caramañola) es que es reusable y no contamina el medioambiente al desechar botellas plásticas.
Otra alternativa para mantenerse hidratado consiste en utilizar una mochila con bolsas para colocar agua. Son un poco pesadas, pues tienen una capacidad de 2 y 3 litros. Una forma de alivianar ese peso es colocando la mochila en una canastilla.
Caso contrario la puede llevar semillena, en sus hombros. Esta mochila tiene un pitillo que permite absorber el agua con facilidad.
Pero además del casco, guantes e hidratación, es necesario que el ciclista lleve los accesorios de inflado.
Una bomba de aire lo salvará de un apuro en la montaña o en rutas de difícil acceso. Son livianas y su costo varía dependiendo del material y de la marca. Un kit con bomba, parches y tubo oscila entre los USD 49,99.
En las tiendas de ciclismo también ofrecen llaves para calibrar, ajustar tornillos y cadenas cortas. Ese kit completo cuesta USD 24,99. Ahí también se incluye una llave hexagonal, que calza en los tornillos de la mayoría de bicicletas.