Primera estación: viajero condenado a morir de coraje por las sorpresas a experimentar. Segunda estación: viajero carga la cruz de su equipaje de angustia.
Tercera estación: a la salida del puente del río Chiche se ha caído parte de la montaña, la vía de acceso se corta; el tráfico se detiene largo tiempo. Cuarta estación: viajero se encuentra con María y suplica ayuda. Quinta estación: viajero es consolado por familiares. Sexta estación: alguna Verónica limpia el sufrido rostro del viajero. Séptima estación: la pala mecánica en su intento de desalojar el derrumbe, se vira.
Octava estación: las mujeres quieren llorar. Novena estación: viajero cae en cuadro de estrés. Décima estación: viajero es despojado de su vestidura de paciencia. Undécima estación: viajero al llegar a Tababela es clavado en la cruz de incertidumbre mientras espera la salida de su vuelo. Duodécima estación: viajero muere de indignación. La información no es precisa y varias veces cambian su sala de embarque. Decimotercera estación: el cuerpo del viajero es bajado de la cruz de angustia. A su destino internacional ha llegado con tres horas de retraso, y el día de su retorno a Quito ha esperado tres horas a su avión en Lima. Decimocuarta estación: el cuerpo del viajero es colocado en el sepulcro de indignación. Ha salido de su destino internacional con tres horas de retraso; y cuando su avión se aproxima a Tababela no puede aterrizar, sino de madrugada en Guayaquil. (Crónica de 28 de julio y 2 de agosto del 2013).