En los países desarrollados las investigaciones de tesis son los motores fundamentales para la generación de publicaciones científicas. Es decir, el profesor trabaja con su estudiante en una investigación con el fin último de publicarlo en la revista de más alto prestigio que sea posible. Esta publicación otorga al profesor un mejor estatus en el ranking científico, asegurando su posición académica y las posibilidades de conseguir financiamiento para futuros proyectos. La publicación otorga al estudiante el currículo necesario para acceder a puestos de trabajo, mientras más publicaciones y de mejor prestigio, mejores son las probabilidades de obtener una posición ventajosa en el mundo laboral. Así funciona en las sociedades del conocimiento. Por esto, las tesis no son para todos, sino para aquel grupo selecto que tiene condición espiritual para la ciencia. Las nuevas universidades, como Yachay e Ikiam, podrían implementar un sistema de tesis para aquellos que deseen graduarse con honores o con distinción especial, en condición superior al resto.