Si mal no recuerdo, hace aproximadamente más de una década, un político de la ‘larga noche neoliberal’ creó el llamado bono de la pobreza, en el cual se etiqueta a los pobres porque el Estado no les brinda trabajo con buenas o aceptables remuneraciones, peor a los minusválidos y ni se diga las paupérrimas jubilaciones a los ancianos. Nunca estuve ni estoy de acuerdo con que se entregue un carné que diga ‘soy pobre por la ineficiencia del Estado’. Esta práctica de la partidocracia ha sido utilizada desde que se creó, ininterrumpidamente hasta el día, y muy bien utilizada para ganar una masa de votación por los socialistas de cafetín ‘socialistas del siglo XXI’, sin que lo eliminen teniendo tanto dinero de China, Irán, Venezuela, según se comenta, y mejorando y creando plazas de trabajo, salarios y jubilaciones racionales. Al continuar con esta práctica electorera de la vieja noche neoliberal, ha permitido que este bono sea ahora subastado como en un remate ‘quien da más’, el partido de Gobierno o el Gobierno, mejor dicho, debido a sus jugosas entradas económicas siempre podrá ofrecer más en lugar de interesarse verdaderamente por salud, educación, etc. Entonces ya le ‘igualaron’ en la cantidad, nuevamente subirá la oferta y ahora ofrecen otros, que se inscriban para obtener vehículos, viviendas, etc. Es decir de programas serios de política y planificación del Estado nada, todo populismo, clientelismo y a comprar votos. Que pena a donde hemos llegado.