Siempre será una gran satisfacción y un gran honor servir a la patria, desde cualquier posición en que nos encontremos. Más aún si se trata de funcionarios, que de una u otra manera, han sido electos para trabajar en beneficio de los más grandes y nobles intereses de la patria. Me refiero a los llamados “padres de la patria” (asambleístas), que representan el segundo poder del Estado.
Con admiración y gran sorpresa, algunos asambleístas han demostrado su descontento de que se les ha disminuido los ingresos por concepto de un “bono de vivienda” mensual, al disminuir de USD 1 020 a USD 708, lo que me parece acertado, por parte del Ministro de Relaciones Laborales. Más aún: pienso que se les debe reconocer solo el 50% del arrendamiento del inmueble, previa la presentación del correspondiente contrato.
Deben ser los primeros en dar ejemplo de austeridad, ante la crisis económica actual. Si no les conviene, den un paso al costado y brinden la oportunidad a otros ciudadanos que sí desean laborar por el desarrollo del país. Quisiera invitar a los asambleístas a que solo por un mes sobrevivan con el sueldo básico de un trabajador (USD 354). Tengan por seguro, que tendríamos algunos infartados.