En una larga presentación de dos funcionarios de Gobierno, se informó a la Asamblea Nacional el 30 de Agosto, respecto a los valores que era necesario destinar para la reconstrucción de las provincias de Manabí y Esmeraldas.
Su monto se calculó en USD 888 millones en total, de los cuales los USD 563 millones correspondían a aportes del Presupuesto del Estado y los USD 325 millones a los ingresos provenientes de la Ley de Solidaridad.
Pero para sorpresa de muchos, los fondos para atender las inversiones necesarias por este concepto, ya no serían USD 888 millones, sino USD 1 500 millones según se desprende de las declaraciones del Coordinador de las Empresas Públicas, que aparecen en El Comercio del 13 de Octubre, pues señala que los recursos que se obtengan por la negociación de varios activos del Estado, estarían destinados para el terremoto.
Me pregunto ¿será el mejor momento para vender tales acciones?, dado el hecho de que los inversionistas extranjeros conocen muy bien las necesidades económicos por las cuales está atravesando el Gobierno Nacional. Pero, algo más, los nuevos requerimientos por la reconstrucción, ¿se ajustan a la realidad o no? Y si es así, se ve claramente lo mal elaborados que estuvieron los presupuestos originales. ¿Alguien responde de ello?