Proyecto tributario y Manabí

Es difícil creer que algún ecuatoriano no sienta que la tragedia de Manabí es algo que nos afecta a todos y por la magnitud de la tragedia nuestra colaboración con los damnificados no es cuestión de días sino permanente y a largo plazo. Por lo tanto, era algo esperado que el apoyo económico a través de nuevos impuestos, aunque sean temporales, era previsible y no podemos rehuir a ellos. Personalmente, lo acepto y en lo que me corresponda, con mucho gusto aportaré, con la esperanza que esa ayuda llegue a quien lo necesite.

Pero también permítanme colaborar con ideas para el proyecto impositivo. Sugiero:

1. Que el IVA para Manabí no se quede en el 12% sino que baje al 2%. Que esta excepción sea por el plazo de 2 años y luego vaya aumentado gradualmente. De esta manera, la provincia se convertiría en una zona franca, se atraería a muchos negocios comerciales, turísticos, bancarios,fábricas, etc., para que se instalen en la zona con efecto directo en el crecimiento del empleo y así la gente no abandonará su tierra buscando trabajo o estableciéndose en otras provincias. (Es muy diferente de devolver el IVA).

2. Que el aumento del IVA al 14% en el resto del país sea por 6 meses y no por un año, pues así se estaría cumpliendo con el objetivo de tener liquidez para atender la emergencia y no se constituiría en un freno al desarrollo económico del Ecuador. Incluso, la gente aceptaría esta medida como algo necesario y lo haría con gusto. Recordemos que las famosas políticas restrictivas del Fondo Monetario Internacional causaron décadas de retraso en América Latina. No hagamos lo mismo con nuestra gente. 

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