Permiso para hablar... No

Qué pena me da, Señores Generales y Almirantes. Siempre he sentido gran admiración por las Fuerzas Armadas, más aún desde la gesta heroica del Cenepa.

La integridad en su accionar y profesionalismo, se ha venido incrementando con los años. Cómo es posible que se dejen mangonear y vilipendiar, por personas sin criterio de la vida militar.

No es posible por más obediencia que se deba tener en la Fuerzas Armadas, se les impida pensar y expresarse libremente, a pesar de ser un principio universal la Libertad de expresión, sobre todo ustedes siguen siendo ciudadanos ecuatorianos.

Si a mucha gente le permiten expresarse, sin comprender, ni saber lo que dicen, parece irónico que a ustedes no les permitan hacer uso de su derecho constitucional a expresarse. Siempre ha existido y existirán jerarquías y mucho más a nivel militar. Señores militares, nadie está pidiendo golpes militares, ni que boten a nadie, pero no pueden ser tan obsecuentes con lo que está pasando con ustedes y nuestro pobre país.  

Suplementos digitales