Desde hace algún tiempo salen a las avenidas América, Occidental y otras, decenas y hasta cientos de municipales con sus uniformes relucientes a pararse en las cuadras para que los desordenados buseros los vean y paren frente a ellos a manera de paradas vivientes.
Toda esa plata de los impuestos que nos exprimen a todos, que debería ser invertida en repavimentación, señalización y otras muchas obras deficitarias en esta pobre ciudad se va en pagar sueldos de municipales para que estén chateando en cada cuadra. De a uno, de a dos o en grupos ríen y matan el día, sin hacer nada.
¿Y qué pasa con los abuseros? Siguen haciendo lo que les da la gana.
Arreglen los huecos, hagan la segunda etapa del túnel Guayasamín, señalicen la Simón Bolívar… ¡Hagan obra!