Un País sin identidad

Los pueblos forjaron su identidad a través de su lengua, gestas históricas, su cultura, su condición racial, cuya exaltación se produjo gracias al efecto catalizador de grandes pensadores del siglo XVIII (Goethe, Benjamín Franklin, Vico, etc.); filósofos, músicos, poetas, escritores, artistas, se erigieron como depositarios de creencias, costumbres, lenguas comunes, circunscritos a un determinado territorio geográfico, que reforzados posteriormente por una historiografía seria, logro consolidar este movimiento; el mismo que permitió a los estados ir configurándose.

La historiografía en nuestro país desde la época republicana, ha sido endeble. El nacionalismo en el Ecuador, debió fundarse alrededor de un referente indígena (carácter consustancial a nuestro acervo cultural); sin embargo la actitud del ecuatoriano está reñida con su origen. Pensadores como Eugenio Espejo o Juan Montalvo les falto exaltar un ícono nacionalista, si lo hizo Guayasamín.

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