Es increíble e inaudito lo que sucede con el Gobierno ecuatoriano, al guardar y apoyar en un silencio cómplice, al dictador Maduro, quien tiene sumido en la miseria y esclavitud al pueblo venezolano, que huye de la crítica situación a países vecinos. La Vicepresidenta del Ecuador, en una entrevista, dijo que Venezuela atraviesa por un buen momento, que no hay crisis, que el desempleo ha bajado un 5% y que la riqueza petrolera se distribuye equitativamente. ¡Qué falacia y falta de visión! Con la complicidad del presidente que legitima al dictador, enviando un mensaje de insensibilidad, ante una situación política y humanitaria que arrastra a millones de venezolanos, así como también el voto de la Canciller en la reunión del Consejo Político del Alba, avalando la conformación de la Asamblea Nacional Constituyente, constituida para que Maduro tome el poder. Como dijo el columnista Farith Simon, “La ceguera ideológica hace que Moreno siga apoyando a un grupo de incompetentes y autoritarios, lo que se puede calificar como de alcahuetería, justificada desde una noción de soberanía incompatible con la protección de los DD.HH.”.