El sábado 7 de marzo fui, como es mi costumbre, a pedalear en el parque Metropolitano, en el norte de Quito. Luego de una ruta de casi una hora, intenté ir por un sendero que ya es conocido. Mi sorpresa fue que había una persona que no me permitió el paso. Según él, unos niños estaban en una capacitación. Tuve entonces que desviarme y buscar otra ruta. El domingo 8 hice lo mismo. Fue cuando en el mismo sitio del sábado, encontré más de media docena de vehículos del Estado, policías uniformados, otros de civil, cuidando a estos niños.
El mismo domingo 8 de marzo, a las 4 y 30 de la tarde, más niños, escoltados por motos y carros del Estado, montaban bicicleta por la av. Gaspar de Villarroel. Obviamente, sin que quienes no gocemos de todas esas protecciones, podamos circular libremente. ¿En eso se usan mis impuestos? ¿Cuidando hijos de algún burócrata que recibe un sueldo que también es gracias a que pago impuestos? Me encantaría que el señor Alvarado nos cuente quiénes eran los niños.
Diego Fernando Castillo