Tengo entendido, y sinceramente aspiro a estar mal informado, que el señor Correa ha sugerido a todos sus empleados que se sientan incapaces o ignoren la realidad del país, mejor no ofrezcan declaraciones a la prensa que no sea la estatal, pues no podrán decir cosas que ignoran o “tienen” que ignorar como: por qué ya son seis meses de impunidad de la ‘narcovalija’, por qué se gastan millones de dólares en aviones de guerra y existe en cambio un casi abandono a la salud y educación, por qué y en base a qué se cierran ciertas universidades y a otras no se las evalúa, y muchas, muchas preguntas más que los ecuatorianos desearíamos conocer las respuestas, como por qué no salió el 30S el señor Correa del Hospital de la Policía entre la 13:45 y 14:20, en que comentan hubo todas las facilidades para evitar el genocidio ocurrido en la noche o por qué se sigue colocando a niños recién nacidos en tinas de plástico y no en cunas pediátricas, o por qué se cierran las vías para parqueamientos aledañas al Hospital Metropolitano, etc., etc.,etc., también debe molestar al Estado, que le pregunten por qué abusa de las cadenas nacionales, por qué aparentemente controla las cortes y por qué se une a grupos que suplican que les den visa al ‘Imperio norteamericano’ como los ‘sobrevivientes’ de AVC. La vida y mis padres me han enseñado que uno tiene que ser sincero con uno mismo, a no vender mi ideología para trabajar en un sitio donde me van a pagar muy bien y especialmente a no creerme dueño de la verdad y no juzgar a nadie.